En el octavo memorial de la explosión en Pasta de Conchos, en Coahuila, ocurrida el 19 de febrero de 2006, deudos y organizaciones sociales que los acompañan en su lucha apremiaron a que se realice el rescate de los cuerpos y se tomen acciones de fondo para impedir que continúe la muerte de mineros en los llamados pocitos de carbón y en las cuevas.

También presentaron testimonios de viudas, huérfanosy demás familiares de las víctimas, así como de otros trabajadores del pocito 3 de Binsa, Vertical 4, Boker y otros pozos en los que se han sufrido accidentes y mutilaciones.

En el contexto de la misa mensual que realiza la Familia Pasta de Conchos afuera de las instalaciones de Grupo México, este 19 de febrero los deudos hablaron de sus casos, de su sobrevivencia, y presentaron fotografías de los huérfanos. Asimismo, se expresaron trabajadores que han sido víctimas de accidentes, quienes demandaron a las autoridades que se acabe con esta injusticia prolongada.

Con camisetas en las que se leía: Pasta de Conchos, a una voz, rescate ya, los deudos, que vinieron en camiones desde Sonora, estaban acompañados por sus hijos y otros parientes, quienes portaban cruces blancas”.

Asistieron al acto representantes del Centro de Derechos Humanos Miguel Agustín Pro Juárez, del Centro de Reflexión y Acción Laboral (Cereal), de Pastoral Laboral y otras organizaciones. Los integrantes de la Familia Pasta de Conchos sostuvieron que no van a cejar hasta lograr el rescate de sus familiares, que esperan que la Procuraduría General de la República dictamine que es factible sacar los restos y que seguirán pugnando por cambios a la ley para que establezcan condiciones laborales dignas para los mineros y que paren las muertes y accidentes de los mismos.

Señalaron que son más de 160 huérfanos y huérfanas sólo de los fallecidos en Pasta de Conchos, e insistieron en que los cambios realizados con la reforma laboral en materia del trabajo en la minería del carbón son sólo una simulación y no detendrán los accidentes y muertes en los pocitos de carbón; por el contrario, aseguran la continuidad de las nefastas condiciones laborales en ellas.

Por su parte, el Cereal planteó que el caso de Pasta de Conchos ya se fue a instancias internacionales, como la Corte Interamericana de Derechos Humanos, y que incluso se logró documentarlo ante la Organización Internacional de Trabajo, la cual ya solicitó al gobierno mexicano ratificar el Convenio 176 sobre seguridad y salud en las minas de carbón, lo cual no ha hecho hasta la fecha.