Amenazada, la subsistencia de miles de agricultores y pescadores, señalan en documento
Lunes 17 de febrero de 2014, p. 24
De construirse la presa Las Cruces en el río San Pedro, en Nayarit, la cortina de 188 metros de altura retendría 90 por ciento de los sedimentos y nutrientes que fertilizan las tierras de cultivo y dan vida a las lagunas costeras de Marismas Nacionales, lo que ocasionaría severos impactos en la actividad agrícola y pesquera, advirtieron las organizaciones SuMar, Consejo Intercomunitario del río San Pedro, entre otras.
La manifestación de impacto ambiental (MIA) del proyecto de la Comisión Federal de Electricidad está en evaluación ante la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales y el próximo 20 de febrero se celebrará la consulta pública.
Su producción vale $150 millones
En la región, alrededor de 10 mil agricultores dependen de las crecidas del río San Pedro y su producción anual se ha valuado en más de mil millones de pesos. La actividad pesquera y ostrícola es el sustento de más de 2 mil familias de pescadores, quienes generan una producción con valor de 150 millones de pesos cada año, solamente en Nayarit. Sin embargo, los efectos negativos se sentirán en todo el Golfo de California, por ser los humedales de Nayarit la principal zona de crianza de camarón
, explicaron en un comunicado las agrupaciones.
Detallaron que la MIA reconoce que “el régimen artificial de caudal eliminaría o disminuiría la cantidad de escurrimientos intermitentes en la zona baja del río, generando un desequilibrio en los procesos de lavado de suelos, en el transporte de sedimentos y en la interconexión entre zonas de acumulación estacionales (…). Este impacto está relacionado con la disminución de la fertilidad de los suelos y del sistema lagunar por la modificación de nutrientes y materia orgánica”.
El documento también apunta, sobre los impactos en la zona costera, que la producción biológica de las aguas marinas será más afectada por los cambios en la composición planctónica, luego las especies que dependen de ésta, entre las que se incluyen especies comerciales de gran importancia para la economía regional y nacional, (las cuales) se verán fuertemente impactadas.
Organizaciones campesinas, ejidos y cooperativas pesqueras ya han manifestado públicamente su oposición a la presa, y toman medidas para solicitarle a la Semarnat que no autorice el proyecto.