Marco Antonio Muñiz se despedirá del público, de los escenarios, con un concierto en el Palacio de Bellas Artes y, quizá, un disco de dúos con voces como las de Marc Anthony y Pablo Milanés, informó ayer en conferencia de prensa en la que presentó el volumen de dos cedés más un devedé bajo el título de El lujo de México en vivo.

Se manifestó alegre y pleno de vida a sus casi 81 años de edad, que cumplirá el 3 de marzo.

El material que presentó fue grabado en el Auditorio Nacional como parte de su gira de despedida. Comenzó a cantar a los 13 años y desde entonces han transcurrido siete décadas.

Decisiva en su carrera fue su etapa en el trío Los Tres Ases, donde le abrió la puerta Héctor González. Inició su fase solista en 1961 en RCA Víctor, con una canción decisiva en su carrera: Luz y sombra, que se convertiría en un clásico del romanticismo en México.

Expuso que todos los grandes cubanos, como César Portillo de la Luz, fueron muy bien conocidos por él. José Antonio Méndez fue casi como mi hermano. Conocí a Benny Moré.

Con tono jocoso recordó que al llegar a la ciudad de México tuvo contacto con Graciela Olmos, mejor conocida como La Bandida (propietaria de una célebre casa de citas de mediados del siglo pasado), donde trabajó al lado de las muchachas. Tuvimos, Los Tres Ases, la oportunidad de estar en La Habana y conocer a Ernesto Hill Olvera (organista ciego), con quien trabajamos en El Tropicana. Ahí conocimos a muchos cantantes y compositores de antes de la trova actual. Admiro y quiero al pueblo cubano en general.

Consideró una fortuna poder cantarle a la gente. Me apena mucho, pero conozco gente con una gran calidad, que no han llegado. Yo sí. ¿Cuándo han escuchado algo negativo de parte mía? Nunca. Ni en escándalos ni en pleitos ni en controversias, o que hable mal de un compañero. Citó a sus cuates de toda la vida, como El Muelón, quien lo acompañaba a la casa de las muchachas, con La Bandida. Siempre traíamos el rifle arriba. ¡Siempre!”

Ya no se venden los discos de hace décadas. Cualquier persona aprieta un botón y ya coinsiguió la canción que quería oír, por eso nosotros estamos en declive en ventas. Ni modo. Una vez retirado me voy a dedicar a la pintura. Nada más a eso. No creo que sea un gran pintor, pero voy a sacar algo de lo que traigo aquí adentro.

Bromeó en serio: Justin Bieber gana en una sola noche lo que yo he cobrado en toda mi vida.