Bagdad, 9 de enero.

Un hombre hizo estallar hoy el chaleco con explosivos que portaba, en medio de reclutas del ejército iraquí que hacían fila para registrarse en el aeródromo de Muthanna, en una zona céntrica de esta capital, lo que causó 23 muertos y 35 heridos.

Ninguna organización se atribuyó este jueves el ataque suicida, pero el hecho de que la explosión haya ocurrido en el centro de reclutamiento de un barrio habitado por musulmanes alawitas –un desprendimiento de los chiítas, que son mayoría en Irak– hace suponer que la acción fue ejecutada por sunitas vinculados al Estado Islámico de Irak y el Levante (conocido como Isil, por sus siglas en inglés), que forma parte de la red Al Qaeda.

Este tipo de ataques entre sunitas y chiítas ha sido una de las constantes en Irak, donde la comunidad sunita –gobernante hasta la invasión estadunidense de marzo de 2003– ha expresado su insatisfacción con el gobierno del primer ministro Nuri Maliki, chiíta que llegó al poder con el consentimiento de Estados Unidos, que apenas en diciembre de 2012 salió de Bagdad.

El ataque suicida ocurrió en momentos en que las fuerzas armadas mantuvieron el asedio al Isil en la provincia de Al Anbar, un día después de que los combatientes salieron de Faluya y Ramadi –60 y 100 kilómetros al oeste de Bagdad, respectivamente– y se replegaron a sus escondites en el desierto, en la región oeste iraquí, fronteriza con Siria.

A pesar del retiro del Isil de las dos ciudades habitadas mayoritariamente por sunitas, el ejército no ha ingresado a las localidades y mantiene tropas en las áreas periféricas en espera de instrucciones.

Los funcionarios locales, no obstante, volvieron a los edificios gubernamentales para reiniciar sus labores administrativas, mientras unas 13 mil familias de Faluya siguen fuera de sus casas por la violencia.

En tanto, Human Rights Watch aseguró que las fuerzas armadas iraquíes han disparado proyectiles de mortero hacia zonas de viviendas, por lo que pidió al gobierno evitar los métodos ilegales y mayores afectaciones a los residentes del área.