Lunes 6 de enero de 2014, p. a12
Nueva York. Fue el musical más costoso de la historia de Broadway, pero también el que más problemas tuvo: La noche del sábado, Spider-Man bajó el telón por última vez. Fue la producción con los efectos especiales más llamativos que jamás se hayan visto en Nueva York. Para recuperar los costos de 75 millones de dólares de la puesta en escena, el espectáculo tendría que haber estado en cartelera al menos siete años, calculó el diario The New York Times. Sin embargo, el teatro Foxwood anunció en noviembre que se acabaría luego de tres años. El interés del público fue decayendo con el paso del tiempo. La única salida económica, por ahora, podría ser el traslado del musical a Las Vegas, que aún se está negociando, señaló el periódico.