Antonio Mohamed tuvo una triunfal presentación en el timón americanista al vencer 3-0 a un inoperante Tigres. El Turco se mostró sonriente y satisfecho, a pesar de que la afición del equipo subcampeón brilló por su ausencia en el estadio Azteca, pues no llenó ni la mitad del graderío en la fría tarde de ayer.

Los tantos amarillos fueron de Luis Gabriel Rey al minuto nueve, Paul Aguilar (30) y Raúl Jiménez (48). Así, el club de Coapa sumó sus primeros tres puntos del torneo Clausura 2014, mientras el decepcionante cuadro regiomontao se fue con las manos vacías.

Tigres se mostró como un equipo sin ritmo ni coordinación, a pesar de que en los minutos iniciales desplegó velocidad y forzó a intervenciones al borde del reglamento al zaguero Aquivaldo Mosquera y Adrián Aldrete, quienes recurrieron a jalones para contener a los explosivos Alan Pulido y al refuerzo felino Darío Burbano, quien estuvo maniatado.

Sin embargo, la defensa norteña extrañó a Hugo Ayala y pronto comenzó a dejar huecos en la retaguardia, lo que aprovechó el América. Al nueve, Rey recibió el balón en el área, eludió la marca de Jesús Dueñas y disparó. La mala suerte abrazó a Carlos Salcido, quien se agachó y desvió el balón que entró a la meta defendida por Enrique Palos, para el 1-0.

El equipo de la UANL no tuvo velocidad ni ideas al frente. Jorge Estrada hizo un tiro bombeado, fácil para Moisés Muñoz; luego Juan Carlos Medina fauleó a Torres Nilo al borde del área y la jugada se desperdició de manera decepcionante.

No sólo Tigres estaba despistado: también el silbante, Ricardo Arellano, se equivocó y validó el segundo tanto americanista marcado en posición adelantada.

Al minuto 30, Medina dio pase a Rey que estaba en el corazón del área; éste cedió en corto a Paul Aguilar, quien definió de derecha para el 2-0.

El colofón rumbo al medio tiempo resultó un soberbio pase de Rubens Sambueza para Rey, quien intentó definir de taquito, pero el balón rodó hacia un costado.

Al 48 de acción, Jiménez tocó la meta visitante con un fuerte disparo que rechazó el guardameta Palos, pero en el contrarremate ya nada pudo impedir que el atacante local anidara el balón para el categórico 3-0.

Cinco minutos más tarde América se salvó cuando Danilinho remató, pero sobre la línea de gol estaba atento Rey para desviar hacia arriba y evitar el tanto de la visita.

Mohamed, con el triunfo en la bolsa, realizó sus cambios sin que nada lo perturbara. Con palmaditas despidió a sus jugadores. Al lado, el Tuca se refugió en el banquillo y con los brazos cruzados contempló la debacle de su equipo, que se salvó varias veces de recibir un cuarto gol, dos de ellas un par de increíbles fallas del Quick Mendoza.

Ricardo Ferretti, sin exaltarse, acusó al arbitraje mexicano de favorecer siempre a las Águilas. Irónico apuntó: “Voy a dar un consejo a mis colegas: cuando tengan que jugar contra el América prepárense para hacerlo contra 12. Creo que es el único equipo en el mundo que juega con 12… pero la verdad, ya cansa”.

Después de reconocer que Tigres fue superado por el anfitrión y que el marcador fue merecido, justo por lo que dejamos de hacer y pudo ser más abultado, rechazó que sus dirigidos hayan carecido de actitud positiva: Jugamos mal, es todo, no tuvimos un partido adecuado.

Indicó que el arbitraje mexicano es bueno, y por lo mismo “me deja intrigado, uno dice, pues por qué. Si dijéramos que es por falta de nivel, que somos humanos y podemos equivocarnos, pero hay de equivocaciones a equivocaciones. Las decisiones siempre son en favor del América es lo que no se entiende. De veras.

“La próxima vez que me toque enfrentar a las Águilas en la práctica me voy a poner de árbitro y marcaré todo en contra para que los jugadores se adapten hacia el día del partido…”, indicó.

No obstante, rechazó un posible castigo de la Comisión Disciplinaria, pues dijo que “tendrían que empezar con el Pacto de Caballeros.

“Si empezáramos poniendo el ejemplo podríamos exigir más… ¿por qué me tienen que sancionar?, (lo que digo) es mi parecer y tengo el derecho de opinar. Las decisiones (de los silbantes) me dan base para hablar, estamos hablando de que (no se marcó) faul a tres milímetros del área grande”.

Mohamed dijo que tuvo el debut soñado y desechó las protestas de su rival: ¡No nos patearon al arco; pudimos hacer cinco o seis goles!

Aseguró que el América es un equipo bien aceitado, bien trabajado. Hicimos un gran partido, no tuvimos sobresaltos, fuimos muy superiores después de los primeros cinco minutos cuando el equipo se acomodó.

Dijo que “cuando empieza un torneo todos saben que los silbantes se equivocan en todos los partidos, en favor o en contra… Pregúntenme de mi equipo, no importa lo que diga el otro (técnico). El resultado siempre es justo, esto se gana con goles y ahora nos queda trabajar y mejorar esa contundencia”.