A lo largo de 2013 el gobierno de México, a través de la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE) alentó el debate sobre las leyes y políticas migratorias en América del Norte, destacando la necesidad de que éstas sean congruentes con la realidad económica y demográfica de la región.

En un amplio comunicado, que destaca las principales acciones de la cancillería en la región, subraya el impulso a la certeza jurídica para los trabajadores y el respeto a sus derechos, para que las familias puedan mantenerse unidas.

Asimismo, la secretaría mantuvo interlocución con los actores involucrados en las discusiones sobre una eventual reforma migratoria en Estados Unidos, como parte de una agenda amplia y equilibrada en América del Norte, tanto en las relaciones bilaterales como atendiendo a los mexicanos en el exterior.

Señala que, con un enfoque estratégico, promovió una visión del fenómeno migratorio que reconoce a los involucrados como sujetos de derechos y como aliados fundamentales para el desarrollo.

En vísperas del 20 aniversario del Tratado de Libre Comercio de América del Norte, y de cara a la Cumbre de Líderes de América del Norte que corresponde organizar a México en 2014, existe una mayor conciencia al interior de los tres países sobre la importancia de su cooperación e integración, así como de los beneficios mutuos de estrechar los vínculos que los unen, asegura la SRE.

En 2013, los presidentes Enrique Peña Nieto y Barack Obama acordaron establecer nuevos mecanismos de coordinación, a fin de asegurar que el trabajo cotidiano entre los gobiernos de México y Estados Unidos se sustente en una visión estratégica compartida.

El Diálogo Económico de Alto Nivel sesionó en septiembre pasado, durante la visita del vicepresidente Joseph Biden, y lo hará anualmente para identificar y atender prioridades en el ámbito económico.

El Foro Bilateral sobre Educación Superior, Innovación e Investigación permitirá articular políticas y programas en esta área de especial importancia. Mediante el Consejo Mexicano-Estadunidense para el Emprendimiento y la Innovación se impulsan ya proyectos específicos, incluyendo el apoyo a mujeres empresarias.

El trabajo del Comité Ejecutivo Bilateral de la Frontera del Siglo XXI continúa trabajando en la búsqueda de mayor bienestar social para las comunidades fronterizas de ambos países. La zona fronteriza y las dinámicas binacionales en ámbitos como la economía y la cultura pueden beneficiar y enriquecer a los dos países.

En tanto, la Alianza México-Canadá, en la que participan los sectores públicos y privados de ambos países, acordó su programa de trabajo con énfasis en proyectos estratégicos que beneficien a las dos naciones con mayor impacto.

Asimismo, el Programa de Trabajadores Agrícolas Temporales, ejemplo internacional de la exitosa gestión de flujos laborales ordenados, continuó ofreciendo beneficios mutuos.

Como han señalado actores sociales y miembros de las comunidades empresariales de ambos países, la facilitación del movimiento de personas debe ser un componente central de este esfuerzo.

Este es el caso de las visas a mexicanos, sobre lo que el gobierno de México ha propuesto pasos para su supresión.

De acuerdo con los censos respectivos, en 2012 vivían 34 millones de mexicanos y personas de origen mexicano en Estados Unidos, y más de 86 mil en Canadá.

Con 50 representaciones, la red consular mexicana en Estados Unidos es la más grande que un país tenga en otro. Con cinco consulados, además de la embajada en Ottawa, la presencia en Canadá es la segunda de mayor tamaño con que cuenta México.

A lo largo del año se establecieron ocho mecanismos regionales de coordinación consular en Estados Unidos y uno más en Canadá.

Además, se realizaron consultas en representaciones nacionales en otros 25 países, con el fin de intercambiar buenas prácticas y dar a conocer la experiencia mexicana.