Ankara, 26 de diciembre.

El primer ministro de Turquía, Recep Tayyip Erdogan, renovó su gabinete la noche del miércoles tras la renuncia de los titulares de los ministerios de Interior, Economía y Medio Ambiente, todos ellos en el ojo del huracán por un escándalo de corrupción.

El problema surgió luego de la detención, el 17 de diciembre, de 24 personas, incluidos hijos de los tres ministros, en una investigación anticorrupción contra unos 80 funcionarios por malversación de fondos y lavado de dinero relacionados con violaciones a la regulación urbanística.

El relevo de la mitad del gabinete incluyó la salida del ministro de Auntos Europeos, Egemen Bagis, y aunque por ahora no ha sido procesado, fue remplazado por Mevlut Cavusoglu, diputado del Partido de Justicia y del Desarrollo , en el poder desde 2002.

Pero el fiscal Maummer Akkas acusó hoy a la policía de obstruir una nueva investigación de alto perfil anticorrupción. Todos mis colegas y la opinión pública tienen que saber que a mí, como fiscal, se me impidió lanzar una investigación, denunció, al sostener que la justicia es presionada por la policía, algunos de cuyos elementos están involucrados en el escándalo.

El diario Milliyet informó antes de este anuncio que Erdogan manifestó que los fiscales planean investigar a sus hijos, quienes dirigen grandes empresas, e incluso a él mismo. El principal objetivo de esta operación soy yo, declaró el jefe de gobierno, que lleva 11 años en el poder.

Afirmó que intentan llegar a él mediante su hijo Bidal, miembro de la directiva de la Sociedad para la Fundación Juvenil y de Educación (Jurgev), encargado de administrar una residencia estudiantil en Estambul.

Para el jefe de gobierno, nada tiene de malo que la municipalidad construya un albergue para estudiantes y luego decida rentarlo por 25 años. Eso no significa que el edificio sea el hotel de Bilal Erdogan, comentó.

Tras reconocer, además, que su hija Edra y Mustafa Damir, el alcalde del distrito de Fatih, forman parte de la jefatura de Jurgev, declaró que cualquiera que intente involucrarlo en el escándalo de corrupción saldrá con las manos vacías, y advirtió contra los intentos de perjudicar al Ejecutivo.

Anoche, miles de manifestantes pidieron la renuncia de todo el gobierno en varias ciudades del país como Estambul, Ankara o Esmirna y hubo llamados a salir nuevamente el viernes a la plaza Taksim, en Estambul.