Los niños que carecen de acta de nacimiento son reflejo de la desigualdad y las disparidades sociales en un país, y en México es un problema que afecta a 7 por ciento de esa población, aunque en las zonas rurales hasta 18 por ciento de los bebés no están registrados antes de su primer año de vida.

Un reporte del Fondo de Naciones Unidas para la Infancia (Unicef) da cuenta del fenómeno, y en particular de la existencia de 172 municipios en la República Mexicana en los cuales menos de la mitad de los menores tienen su acta de nacimiento antes de cumplir un año.

A escala mundial, dicho problema afecta a uno de cada tres niños, lo que no sólo significa la violación de sus derechos humanos, sino también la negación de acceso a educación, atención de la salud y seguridad social, señala el organismo.

Entre los más afectados por la carencia de acta de nacimiento están los niños de algunos grupos étnicos o religiosos, los que viven en zonas rurales o remotas, los pequeños de hogares pobres o los de madres sin instrucción.

El informe del Unicef señala que alrededor de 230 millones de niñas y niños menores de cinco años no están registrados, lo que equivale a uno de cada tres de ese grupo de edad, y advierte que la Convención sobre los Derechos del Niño define el derecho a la identidad y a la nacionalidad. Ambos son la puerta de entrada para garantizar el cumplimiento del resto de las garantías fundamentales de los infantes.

En cualquier caso, dice, la emisión del acta debe ser universal, gratuita y oportuna. El reporte El derecho al nacer de todos los niños: las desigualdades y las tendencias en el registro del nacimiento analiza las estadísticas de 161 naciones y presenta los últimos datos y estimaciones disponibles de esos países sobre el registro del nacimiento.

Resalta que en 2012, a escala mundial se registraron de manera oficial 60 por ciento de los nacimientos, aunque las variaciones son significativas en las diferentes regiones. Por eso, los niveles de registro más bajos se presentan en Asia meridional y en África subsahariana, con entre 4 y 28 por ciento.

En algunos sitios, a pesar de que existe el registro, los menores carecen del documento oficial, lo que también es un problema que viven uno de cada siete niños.

Sobre la situación en México, el Unicef plantea que si bien la tasa de registro oportuno es de 93.4 por ciento, los niños que carecen de su acta de nacimiento deben tener atención prioritaria, sobre todo en las áreas rurales.

En las zonas urbanas, el registro durante el primer año de vida llega a 97.7 por ciento, pero en las rurales hasta uno de cada cinco nacimientos no se registran en ese periodo.

El Unicef destaca que además de la exclusión del ejercicio de derechos elementales, la carencia del acta de nacimiento representa una situación de riesgo cuando los niños son separados de sus familias por situaciones de desastres naturales o conflictos, debido a que la reunificación se dificulta por falta de un documento oficial de identidad.

Recordó que en 2013 empezó en México una campaña en colaboración con el gobierno federal para el registro oportuno y universal de los nacimientos. Se trata de aumentar ese trámite en los hospitales y acercar el servicio del Registro Civil a las comunidades rurales, indígenas y de migrantes. Las actividades se intensificarán en 2014 con una estrategia en los medios de comunicación.