A pesar de que en la década pasada la Secretaría de Educación Pública (SEP) destinó más de 3 mil 500 millones de pesos a la formación y capacitación de los profesores en servicio, en un diagnóstico del sistema educativo se advierte que hasta la fecha la oferta brindada no ha demostrado ser pertinente a las necesidades de los profesores y de los directivos.

En el análisis, contenido en el programa sectorial de educación 2013-2018, se indica que en esta profesionalización no existe evidencia de su impacto en la trasformación de las prácticas de enseñanza, pues se considera que la formación continua de los docentes debe considerar la escuela como espacio donde también aprenden los maestros.

Con base en los resultados de las negociaciones entre la SEP y el Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE) respecto a la revisión salarial, durante los gobiernos del presidente Vicente Fox y Felipe Calderón, la Federación destinó 3 mil 509 millones de pesos a los programas de capacitación de los profesores de prescolar, primaria y secundaria en el país.

Sin embargo, apenas en la administración pasada se etiquetaron al menos 2 mil 759 millones para ese propósito, pues sólo en 2009 se destinaron 588.8 millones de pesos, y en 2011, 524.3 millones de pesos al rubro citado.

Planean rediseño de normales

Como parte de las acciones que la SEP impulsará en este sexenio, se encuentra la formulación de un plan integral de diagnóstico, rediseño y fortalecimiento del Sistema de Normales Públicas, pese a que en 2012 se inició la aplicación de la reforma de planes y programas de estudio para la formación de docentes.

La dependencia también pondrá a disposición de las escuelas un conjunto de apoyos para que los docentes constituyan y desarrollen comunidades de aprendizaje profesional; además, se alentará la creación y formación de redes de escuelas y educadores para fortalecer su desarrollo laboral.

La autoridad educativa federal insiste en que otro de los aspectos que influyen en la educación es la relación de la escuela con su entorno. El vínculo con los padres de familia no puede basarse sólo en el cobro de cuotas obligatorias que, insiste, están prohibidas por mandato legal en los centros escolares, expone la dependencia.

Además de la consolidación de los lazos entre los planteles educativos y los padres, será necesario reforzar los vínculos de las escuelas con las autoridades de salud, con el propósito de que brinde asistencia prioritaria a estudiantes con problemas personales y familiares serios.