Acolman, Méx., 17 de diciembre.

Más de 40 horas después de que ocurrió una fuga y un incendio en un ducto de Petróleos Mexicanos (Pemex) en la comunidad El Faro, en los límites entre los municipios de Tezoyuca y Acolman, el fuego no había sido sofocado. Personal de la paraestatal calculó que el combustible tardaría unas 24 horas en consumirse.

El accidente dejó siete lesionados con quemaduras leves y las 800 familias desalojadas regresaron este martes a sus hogares.

El robo de combustible mediante tomas clandestinas provocó una fuga en el ducto de 24 pulgadas de gas licuado de petróleo (LP) que va de San Martín Texmelucan, Puebla, a Venta de Carpio, Ecatepec. Posteriormente ocurrió una explosión y una columna de fuego que la madrugada del lunes alcanzó 50 metros de altura y este martes medía 10.

Vecinos de las comunidades aledañas demandaron a Pemex vigilar constantemente sus ductos, pues en un año se han detectado ocho tomas clandestinas en la zona donde ocurrió la explosión.

El edil de Tezoyuca, Arturo Ahumada Cruz, informó que trabajadores de la paraestatal calculan que la mañana de este miércoles se apagará la llama y que tratarán de evitar que se consuma la menor cantidad posible, pues la válvula más cercana se encuentra a 12 kilómetros.

Al principio los técnicos determinaron dejar que se consumiera el gas, pero ahora optaron por disminuir la cantidad porque todavía queda mucho carburante en el ducto.

Las autoridades de Acolman y Tezoyuca dijeron estar preocupadas por los daños a la salud que pudiera causar la contaminación atmosférica y señalaron que ya se han reportado algunos pacientes con malestares respiratorios.