Al entrar en vigor, ayer viernes, la tarifa de 5 pesos en el precio del boleto del Metro se registraron algunas manifestaciones de rechazo sin que se reportaran incidentes mayores.

De acuerdo con el director del Sistema de Transporte Colectivo Metro, Joel Ortega, las protestas se realizaron en 14 de las 195 estaciones de este sistema. Llegan a la estación, lanzan sus consignas, entregan propaganda, algunos de los usuarios se pasan sin pagar, pero la mayoría deposita su boleto en el torniquete, comentó.

Tal como se había anunciado ante el llamado de organizaciones sociales a brincarse los torniquetes o facilitar el acceso de los usuarios por la puerta de cortesía, las autoridades del Metro mantuvieron una posición de tolerancia.

Sólo esperamos que respeten las instalaciones, no dañen los torniquetes ni afecten las cámaras de videovigilancia, señaló Ortega Cuevas durante una conferencia de prensa en la que anunció que después de 22 años, se desmontaron 15 torniquetes de la línea A del Metro, por lo que 380 mil usuarios del estado de México ya no realizarán el doble pago al transbordar en la estación Pantitlán a las líneas 1, 5 y 9.

Las estaciones fueron resguardadas con policías auxiliares y de la PBI, quienes se limitaron a observar las acciones de los manifestantes sin intervenir.

A lo largo del día visitadores de la Comisión de Derechos Humanos del DF (CDHDF) vigilaron los sitios donde se registraron las protestas para documentar que no hubiera violaciones a derechos humanos y se permitiera la libre manifestación de la protesta.

Por la noche, la presidenta de la CDHDF, Perla Gómez, informó que no se recibió ningún reporte de incidentes mayores ni se presentaron quejas.

Desde antes de las siete de la mañana con pancartas y consignas grupos de jóvenes invitaron a los usuarios a no pagar el boleto y saltar los torniquetes en las estaciones Toreo, Universidad, Tláhuac, Pantitlán, Tlaltelolco, Buenavista, Balderas, Constitución de 1917, Bellas Artes, Pino Suárez, Copilco y Miguel Ángel de Quevedo. Mientras, en Indios Verdes y Tax- queña sólo se llevaron a cabo jornadas informativas y se colocaron cartulinas en algunos pasillos para expresar el descontento ante el incremento en dicho medio de transporte.

En la estación Ermita, de la línea 2, un elemento de seguridad pidió salir de las instalaciones a cuatro jóvenes que empezaban su manifestación. Mientras, en Constitución de 1917 se les impidió colocar una pancarta porque se obstruía la visibilidad, situación que generó inconformidad y tensión por algunos minutos.

Por la tarde, cientos de jóvenes, que se identificaron como estudiantes de diversas universidades y preparatorias, así como integrantes de diversos colectivos, se dieron cita en el Monumento a la Revolución para marchar al Zócalo capitalino.

Al llegar al Hemiciclo a Juárez granaderos les impidieron el paso y decidieron marchar sobre Paseo de la Reforma. Pese a que hubo descontento no se suscitó ningún enfrentamiento.

Tras permanecer unos minutos en el cruce de Insurgentes y Reforma, los inconformes decidieron tomar los torniquetes en las estaciones del Metro cercanas y permitir el paso a la gente de forma gratuita.

Una de las estaciones con mayor afluencia de manifestantes fue Insurgentes, donde incluso ingresaron granaderos, que se retiraron minutos más tarde.