Con el voto significativo de los chuchos, la Cámara de Diputados aprobó ayer en lo general la minuta del Senado con la reforma constitucional en materia político-electoral, a la que se hicieron cinco cambios, por lo que el documento será devuelto a los senadores, aunque el acuerdo con éstos es que lo avalen y el decreto sea turnado al Constituyente Permanente para su ratificación.

De esta manera, se cerró el círculo legislativo a una reforma que el PAN exigió a cambio de aprobar la energética, que está en puerta en el Senado. Cuando los panistas festejaban como único valor de la reforma la relección inmediata de diputados para 2015, un pacto de última hora trasladó la entrada en vigor de esa disposición a 2018, al igual que la de senadores.

En esa decisión influyó el rechazo a que se viera a los diputados como beneficiarios directos de la relección y el hecho de que, de aplicarse en los próximos comicios, un buen número de personajes en la reserva nacional de talentos –como se conoce en el argot político– vería mermadas sus posibilidades de acceder a una curul ese año.

Diputados de PRD, PT y Movimiento Ciudadano cuestionaron que Acción Nacional diera su aval a la reforma con tal de lograr una relección que sólo producirá una nueva gerontocracia legislativa, e incluso perredistas pegaron globos en la pared izquierda del salón, así como un cartelón en el que pintaron dos dinosaurios, uno azul y otro rojo, con las siglas del tricolor y de Acción Nacional y la frase estamos de fiesta.

Con 408 votos en favor, entre PRI, PAN, Nueva Alianza y Verde Ecologista, así como los de las corrientes perredistas de Nueva Izquierda y ADN, se dio por cubierto el requisito del voto de las dos terceras partes de los diputados presentes para avalar una reforma constitucional, pero sin que se cumpliera el trámite legislativo de que la minuta fuera dictaminada en comisiones.

Mientras, 69 integrantes de otras tribus del PRD, así como las bancadas de PT y Movimiento Ciudadano votaron en contra y tres más del PRD se abstuvieron: Claudia Elena Aguilar, Silvano Blanco de Aquino y Carol Antonio Altamirano; al inicio de la sesión, este último presentó una moción suspensiva, la cual fue rechazada.

A pesar de que asistieron a la sesión, al momento de que la minuta se votó no estuvieron presentes las cabezas de PT y Movimiento Ciudadano.

En el tablero se reflejó la ausencia del coordinador petista, Alberto Anaya, y del vicecoordinador, Ricardo Cantú. Por Movimiento Ciudadano no votaron Ricardo Monreal, líder de la bancada, y Alfonso Durazo.

Entre los ausentes de otros partidos resaltó la presidenta de la Comisión de Asuntos Migratorios, Amalia García Medina, del PRD, y su compañera de bancada Crystal Tovar Aragón, sobrina de Hortensia Aragón, ex secretaria general del PRD.

El pleno aceptó un paquete de cambios a la minuta, como la disposición para que un partido pueda mantener el registro cuando obtenga al menos 3 por ciento del total de la votación válida emitida, y no, como aprobó el Senado, del total de la votación.

También se recuperó la facultad exclusiva de la Comisión Permanente para ratificar embajadores, cónsules generales y empleados superiores de Hacienda, y la atribución exclusiva de la Cámara de Diputados para designar al consejo directivo del Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social (Coneval).

A las 18 horas, la Cámara empezó la revisión de 167 reservas a la minuta. Al cierre de esta edición, diputados de PRD, PT y Movimiento Ciudadano seguían la presentación de sus reservas, que fueron desechadas por la mayoría PRI-PAN y sus aliados de PVEM y Panal, y se preveía que la discusión terminara en la madrugada de este viernes.

Luego de que la minuta se aprobó en lo general, las filas priístas relajaron su presencia en el salón de plenos. La diputada Aída Valencia Ramírez (MC) presentó una reserva para proponer que se suprimiera la atribución que la reforma dio al Ejecutivo federal para que pueda objetar el nombramiento del presidente y los seis consejeros del Coneval, lo que –advirtió– restará autonomía al órgano encargado de medir la pobreza.

Ante la ausencia de la mayoría del PRI, la reserva fue rechazada con apenas 29 votos de diferencia, al registrarse 228 en contra y 199 en favor.

Entre las voces que se escucharon, pero que no se atendieron, el diputado Rosendo Medina Filigrana (PRD) cuestionó que si en 1910 Francisco I. Madero basó su campaña presidencial con el lema sufragio efectivo, no relección, ahora otro Madero manda a sus huestes a regresar 100 años las manecillas de la historia.