Exigen formar un gobierno de conciliación nacional y reanudar negociaciones con la UE
El ministro alemán del Exterior visita Kiev y se reúne con inconformes en la Plaza Independencia
Jueves 5 de diciembre de 2013, p. 34
Moscú, 4 de diciembre.
La confrontación entre oposición y gobierno no bajó de intensidad este miércoles y, por el contrario, los adversarios del presidente Víktor Yanukovich, quien está de visita en China, le dieron dos días de plazo para que convoque elecciones presidenciales y parlamentarias anticipadas.
También exigen la formación de un gobierno de conciliación nacional, la reanudación de negociaciones con la Unión Europea (UE) para retomar la vía de la asociación y la liberación de los presos políticos, como denominan, en particular, a la ex primer ministra Yulia Timoshenko, principal rival de Yanukovich, condenada a siete años de prisión por firmar unos contratos desventajosos para Ucrania de suministro de gas ruso.
Incluyen, junto con Timoshenko, a los 53 activistas que tienen causas penales abiertas por su participación en las manifestaciones, 11 de los cuales están en prisión provisional durante dos meses, y a los diez opositores de quienes no se tiene noticia desde el domingo anterior.
De no aceptar el ultimato, los opositores amenazan con incrementar las acciones de desobediencia civil y bloqueo de las instituciones gubernamentales, mientras muchas empresas secundan la huelga general y el epicentro de la protesta se concentra en la Plaza de la Independencia.
Ahí apareció esta noche Guido Westerwelle, ministro de Relaciones Exteriores de Alemania, quien llegó a Kiev para asistir a una reunión de cancilleres de la Organización para la Seguridad y Cooperación en Europa (Ucrania ejerce en 2013 la presidencia rotatoria de la OSCE), prevista desde hace tiempo para este jueves y viernes y que no se canceló pese a la crisis.
El destino de Ucrania no nos resulta para nada indiferente. Apoyamos los valores europeos y reiteramos que las puertas de la UE siguen abiertas. Ucrania debe estar con Europa
, declaró Westerwelle tras su reunión con los líderes opositores, Vitali Klichko, Arseni Yatseniuk y Oleg Tiagnibok.
Westerwelle hizo público su respaldo a los opositores y acudió a saludar a los manifestantes reunidos en la Plaza de la Independencia, inusual gesto que pone de relieve la debilidad del actual gobierno.
Los opositores también recibieron hoy el apoyo de los tres ex presidentes de Ucrania en sus casi 23 años de vida independiente –Leonid Kravchuk, Leonid Kuchma y Víktor Yuschenko–, los cuales emitieron una declaración que critica la intolerancia del gobierno y lo insta a negociar.
Ucrania está inmersa en una profunda crisis política que puede tener serias consecuencias para el Estado, su integridad territorial, soberanía e independencia
, advierten los ex mandatarios.
Expresamos nuestra solidaridad con las acciones pacíficas de cientos de miles de ucranianos, jóvenes la mayoría. Su compromiso con la causa europea y los valores democráticos brindan respeto a este movimiento, que cuenta con respaldo sin precedente en la sociedad
, afirman.
Por su parte, desde Bruselas, Serguei Lavrov, ministro de Relaciones Exteriores de Rusia, criticó la declaración que formuló la víspera la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN) condenando el uso de la fuerza la madrugada del sábado en Kiev.
La declaración de la OTAN envía un mal mensaje
, opinó Lavrov, y agregó: no sé para qué su secretario general responde a la pregunta de la prensa de qué haría la OTAN si Rusia manda tropas a Ucrania. Este tipo de absurdas invenciones sólo crea una visión distorsionada de la realidad
.
Para Lavrov, el ejecutivo de Ucrania consideró que había razones para suspender los preparativos de la firma de un acuerdo de asociación con la UE y tomó las medidas pertinentes. Es un asunto interno de Ucrania y hay que respetarlo”.
El primer ministro de Rusia, Dimitri Medvediev, recibió hoy en Moscú al vicepremier de Ucrania, Yuri Boiko, quien vino a pedir una rebaja en el precio del gas que Rusia vende a Ucrania, cuestión que difícilmente pueda resolverse sin entendimientos al máximo nivel, esto es, sin una nueva reunión entre los presidente Vladimir Putin y Víktor Yanukovich.
Se especula que Yanukovich, cuando termine su visita a China el viernes, podría hacer escala en Moscú camino a Kiev.
