Es una vergüenza para las autoridades
Lunes 2 de diciembre de 2013, p. 21
San Juan El Bosque, Chis., 1° de diciembre.
Fueron 13 años para matarme en vida. Pero fui resucitado en vez de morir. En vez de callar, aprendí a hablar
, dice de su largo cautiverio Alberto Patishtán ante la pequeña multitud que lo recibe. Somos pobres, pero ricos en principios y valores, en dignidad y respeto. Sabemos resistir e insistir por la justicia
.
El pueblo tzotzil de El Bosque acogió multitudinariamente a su hijo más famoso y admirado. Trece años de ausencia le dan hoy a Patishtán Gómez una contundente y conmovedora presencia. Desde la mañana, aquí no han hecho sino recibirlo. Lo acompañaron por las calles. La de abrazos que se dieron con él. Hubo rezos y cantos católicos, cohetones, dianas, discursos, agradecimientos y la carne poderosa de tres toros sacrificados para la ocasión. El profesor se dijo no sólo contento, feliz
. Su compañero de muchas batallas, el profesor Martín Ramírez expresó a nombre del Movimiento de El Bosque en Defensa de Pueblo: Todos ganamos, vamos a celebrar una victoria
.
Pero lo contento no quita lo indignado: Costó 13 años liberar a un inocente. Es una vergüenza para todas las autoridades federales y estatales. En México no existe la justicia. La rabia no se va a acabar. Tampoco la memoria
, señala el profesor Ramírez López. Durante el emotivo acto público, Patishtán relata que el pasado 31 de octubre, al obtener la libertad, se comunicó con sus amigos y familiares aquí en El Bosque. Oyó risas y voces por el teléfono. También nosotros nos liberamos
, le estaban diciendo.
Agradecimientos
En una larga mesa en el estrado del domo municipal acompañan a Patishtán, este medio día, su abuelo (muy querido
) Francisco Mariano Gómez Gómez, su tía Carmen, quien tanto pugnó por su liberación, y su ex suegro Gregorio Ruiz, quien se hizo cargo de los dos hijos menores del profe cuando éste fue encarcelado y su cónyuge abandonó a los tres de manera bastante ignominiosa. Lo sigo llamando mi suegro
, revela el festejado, quien también reconoce a sus abogados Leonel y Sandino Rivero, y a los organismos civiles y colectivos que estuvieron siempre a mi lado
.
El presentador pone de su parte. Señala hacia Patishtán: Tenemos aquí a la persona que el destino y la mala suerte nos había arrebatado
. Luego pide un fuerte aplauso para el compañero que nunca dio un paso para atrás, el profesor Martín Ramírez
. Este, en uso de la palabra, dice: En 2000 éramos un puñito. Ahora somos una gran cantidad de gente en todos los continentes del mundo
. Recuerda que quedan tres compañeros en la cárcel
(Miguel Demeza, Antonio Estrada y Alejandro Sántiz, adherentes a la Sexta declaración de la Selva Lacandona), y luego de exigir cumplimiento de los acuerdos de San Andrés (bien dijo que la memoria no se acaba
) y expresar solidaridad con los desplazados de Puebla (Chenalhó) y Banavil (Tenejapa), los presos políticos del país y los maiceros inconformes en varios municipios de Chiapas
, denunció hostigamientos y represión del actual alcalde Humberto López Pérez, así como sus antecesores, por defender a Patishtán
. Pero dejé de tener miedo hace 20 años
, añade.