Guadalajara, Jal., 1º de diciembre.

Mario Vargas Llosa dijo que en la América Latina actual existen más razones para el optimismo que para el pesimismo, no sólo porque la región ha salido avante del cataclismo económico que cimbró a los países desarrollados sobre todo en Europa, sino porque las dictaduras que antes prevalecían han dado paso a una democracia que ha logrado que las pocas semidictaduras que hoy existen se vean anacrónicas.

La constante es que América Latina va para mejor, en general, aunque algunos países vayan para peor. Cuando yo era joven había dictaduras de un extremo a otro, las excepciones eran Chile, Costa Rica, Uruguay y paren de contar. Hoy día las dictaduras militares no existen, afirmó en rueda de prensa en el marco de la Feria Internacional del Libro (FIL) de Guadalajara.

Consideró que con las excepciones de Cuba y Venezuela, que se acerca cada vez más a una dictadura, en general lo que prevalecen son naciones con procesos democráticos imperfectos en casos como Nicaragua o Bolivia, pero en el resto de Latinoamérica la democracia se abre camino con elecciones más o menos limpias.

El Premio Nobel de Literatura 2010, quien alguna vez fue candidato presidencial en su natal Perú, dijo que en los 30 años recientes el panorama entre los países latinoamericanos cambió de forma radical, sobre todo al terminar con la utopía revolucionaria.

En el Perú en los años 80 tuvimos la revolución senderista: 70 mil peruanos murieron en 10 años por creer que a través de la filosofía maoísta iba a llegar la igualdad al Perú. Pero eso se acabó y donde todavía queda, como en Colombia, da la sensación de que se está deshaciendo, porque el aire en América Latina hoy ya no es propicio. Eso es un progreso.

Antes de llegar a Guadalajara, Vargas Llosa estuvo con el presidente Enrique Peña Nieto. Cuestionado sobre México en el contexto latinoamericano, afirmó que el país ha cambiado también en forma muy importante en los dos decenios pasados.

“México hace 20 años era una dictadura de un partido hegemónico con 70 años en el poder, con una corrupción enorme, los presidentes salían ricos. Creo que hoy no; hay una democracia, partidos políticos rivales, fuerzas independientes presentes en el parlamento, en los medios de prensa, manifestaciones gigantescas; hoy día se puede atacar al poder (…) Está muchísimo mejor que hace 10, 20 o 30 años, en los tiempos de la dictadura perfecta”.

Durante la reunión con medios, Vargas Llosa también habló de su reciente novela, El héroe discreto, en la que afirma que esa esperanza optimista de una sociedad plegada a la legalidad y al orden democrático, logró colarse en una trama donde la violencia y la extorsión sacuden la vida interna de las familias y las personas.