iudad del norte de Alemania, cuyos datos de su fundación se remontan al año 1131, alberga en el mes de noviembre el festival de cine más importante del estado de Baja Sajonia. La originalidad de este encuentro cinematográfico radica en sus orígenes y el desarrollo que en sólo 27 años ha logrado el Internationales Filmfest Braunschweig, Festival Internacional de Cine de Braunschweig.

Braunschweig se viste de amarillo con unos sugerentes ojos desdibujados. La originalidad del logotipo distingue a este encuentro del paisaje de festivales cinematográficos europeos.

Los ojos de alguna personalidad del mundo del cine se plasman en un fondo amarillo intenso. Se convoca a un concurso para que los ciudadanos adivinen el actor o actriz detrás de esos ojos. El ganador recibe un pase para asistir a las funciones del festival.

En 1987, 20 jóvenes estudiantes de cinematografía decidieron organizarse en una asociación sin afanes de lucro para ofrecer a Braunschweig cine de calidad.

Hoy día, aquella asociación de amigos del cine, a la que se ha sumado un ejército de voluntarios, instituciones que ofrecen apoyo financiero y un público fiel, ha logrado convertir a este festival en una de las citas más importantes en Alemania para los amantes del cine.

El Universum, antiguo cine rescatado por estos jóvenes, es la sede del festival y donde el espectador asiduo puede lograr que su nombre sea bordado en alguno de los asientos.

La importancia de la música en el cine se ha materializado con el trabajo en cooperación del festival con la Orquesta Sinfónica de la ciudad de Braunschweig.

En la edición de este año fue invitado el músico español Alfonso de Vilallonga, autor de la música de Blancanieves, del director español Pablo Berger, ganadora de 10 premios Goya.

La actriz alemana Barbara Sukowa, protagonista de la aclamada cinta Hannah Arendt, de la también realizadora alemana Margarethe von Trotta, recibe este año el Premio Europa.

¿Y de quién son estos ojos? Adivinó. Michael Caine.

Alia Lira Hartmann