A golpes y con gases lacrimógenos los desaloja de plaza; decenas de heridos y arrestados
El presidente Viktor Yanukovich intenta deslindarse y se dice indignado
por los hechos
Opositores crean el Comité Nacional de Resistencia, que organizará una huelga nacional
Domingo 1º de diciembre de 2013, p. 27
Moscú, 30 de noviembre.
El presidente de Ucrania, Viktor Yanukovich, llevó este sábado su confrontación con la oposición política a un punto de ruptura, después del violento desalojo de la Plaza de la Independencia de Kiev, rebautizada como Evromaidan (Plaza de Europa), donde centenares de partidarios de la asociación con la Unión Europea (UE) habían acampado en señal de protesta permanente.
Con alevosía y ventaja, las unidades Berkut (Águilas reales, en ucraniano, distintivo de las unidades antimotines del Ministerio del Interior) entraron al campamento hacia las cuatro y media de la madrugada de este sábado lanzando gases lacrimógenos y repartiendo golpes a diestra y siniestra.
Como resultado del operativo –exceso de violencia frente a ciudadanos desarmados–, medio centenar de manifestantes acabaron en la cárcel y decenas quedaron con lesiones de distinta gravedad.
Entre los aprehendidos, 35 requirieron atención médica; siete de ellos se encuentran ingresados en hospitales. Otros fueron puestos en libertad y algunos más permanecen aún retenidos por la policía.
Se decidió hacer uso de la fuerza –según afirmó esta noche el titular de la policía de Kiev, Vitali Koriak, quien reconoció haber dado la orden de desalojar la plaza– cuando los manifestantes impidieron que los empleados de los servicios urbanos realizaran su labor: colocar un árbol de Navidad en la plaza
.
Sostiene Koriak que los protestantes no quisieron abandonar el sitio y recibieron a las unidades Berkut a pedradas y botellazos.
El presidente Yanukovich guardó silencio durante casi todo el día, hasta que apareció por la noche en las pantallas de la televisión local y satelital para dirigir un breve mensaje a la nación, en el cual intentó lavarse las manos y se mostró indignado
por lo ocurrido.
Condeno las acciones que derivaron en choques violentos y sufrimiento de la gente
, expresó Yanukovich y ordenó a la procuraduría esclarecer los hechos para castigar a los culpables.
El primer ministro, Nikolai Azarov, también externó en un comunicado su indignación y preocupación
por el desalojo. “Las personas que de manera legal y pacífica protestan son nuestros conciudadanos (…) Valoramos su opinión y posición, y dialogamos con ellos, igual que con otros miembros de nuestra sociedad”, apuntó.
Los adversarios de Yanukovich anunciaron hoy, a raíz de la agresión sufrida por sus militantes, la fundación del Comité Nacional de Resistencia, formado por tres partidos de oposición Batkvischina (Patria), UDAR (Golpe) y Svoboda (Libertad), que se encargarán de preparar una huelga nacional y de bloquear el trabajo de la Rada o Parlamento, como dos de sus primeras acciones.
Arseni Yatseniuk, líder de Batkvischina, resumió la meta de los opositores: Celebrar elecciones anticipadas tanto presidenciales como parlamentarias
.
La protesta se trasladó a la Plaza Mijailovskaya, donde desde la tarde se celebra un mitin contra Yanukovich y su gobierno, y las autoridades prometieron no mandar ahí a las unidades Berkut.
Este sábado siguen siendo analizadas con detenimiento las seis condiciones que Yanukovich presentó a sus colegas en la cumbre de Vilnius, que terminó el viernes anterior, para firmar el acuerdo de asociación con la UE.
Resumidas, éstas son: “Desbloquear los programas de apoyo presupuestario sectorial (más o menos 185 millones de euros).
“Restablecer de inmediato la interacción bajo condiciones aceptables con el Fondo Monetario Internacional y con el Banco Mundial (pide un crédito de 15 mil millones de dólares y rechaza las condiciones impuestas).
“Eliminar en la UE las medidas comerciales restrictivas contra la importación de algunos productos ucranianos.
Modernizar de modo conjunto el sistema ucraniano de transporte de gas (entre 5 y 7 mil millones de dólares) y reconsiderar la participación de la UE en proyectos que eluden el territorio de Ucrania
, como los que promueve Rusia por el norte y el sur y que, a largo plazo, pueden hacer innecesario el tránsito por territorio ucraniano.
Compensar las pérdidas que sufrirá la economía ucraniana y, para ello, crear una comisión Ucrania-UE-Rusia
, que se ocupe de buscar soluciones aceptables para todos.
Por último, establecer un régimen de supresión de visados entre Ucrania y la UE
, que beneficie a los millones de ucranianos que ahora tienen que viajar a Rusia en busca de trabajo para mantener a sus familias.