En la quinta parte de los hogares de México vive alguna persona con discapacidad, pero la mayoría de las personas que presentan alguna deficiencia física o enfermedad se concentra en los hogares más pobres, cuyos ingresos por trabajo llegan a ser menores respecto de los que reciben mediante transferencias de programas sociales, reveló el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi).

Al recordar que el 3 de diciembre es el Día Internacional de las Personas con Discapacidad, el Inegi precisó que en términos de población, 6.6 por ciento de los mexicanos presenta alguna dificultad (discapacidad) para realizar al menos una de las actividades medidas: caminar, ver, escuchar, hablar, comunicarse, poner atención o aprender, atender el cuidado personal y mental. De ellos ocho de cada 10 tienen más de 29 años y sólo 7.3 por ciento son niños menores de 14 años.

En el país existen 31.5 millones de hogares y de ellos 6.1 reportan al menos una persona con discapacidad; es decir, en 19 de cada cien hogares, indicó. De ellos, en 78 por ciento sólo hay una persona en estas condiciones pero en 18 por ciento viven dos personas discapacitadas e incluso en 3 por ciento de estos hogares habitan tres o más discapacitados.

Los gastos en salud llega a representa entre 3 y 5 por ciento del total de las erogaciones de los hogares más pobres que tienen personas con discapacidad, ya que la mayor parte lo destinan a alimentos y vivienda.

El Inegi subrayó que la discapacidad no debe entenderse sólo como deficiencia física o enfermedad, sino que incluye hasta el entorno que por sus características afecta la capacidad de las personas para realizar sus actividades cotidianas, de acuerdo con el cambio conceptual que desde 2001 adoptó la Organización Mundial de Salud. (OMS).

Personas con discapacidad tienen dificultades para utilizar algunas estaciones del Metrobús en la ciudad de MéxicoFoto Guillermo Soluguren

La dificultad para realizar una tarea expresa tanto la presencia de una deficiencia como la influencia negativa o poco facilitadora del entorno. Por ejemplo, la dificultad que puede tener una persona para caminar puede deberse tanto a problemas de salud como a la falta de infraestructura y equipamiento adecuado para ella, señaló.

Si bien el mayor número de discapacitados se concentra en las entidades con mayor población, como el Distrito Federal, estado de México, Jalisco y Nuevo León, proporcionalmente hay más mexicanos en esta situación en Tabasco, Oaxaca, Yucatán y Nayarit, que rebasan la media nacional porque 10 por ciento de su población es discapacitada y lo atribuyó al nivel de desarrollo económico y social, la cobertura y calidad del sistema de salud así como la edad.

Según la Encuesta Nacional de Ingresos y Gastos de los Hogares (ENIGH) que el Inegi levantó en 2012, 51.4 por ciento de los discapacitados son adultos mayores y 33.7 por ciento personas de 30 a 59 años de edad. También hay un segmento de 7.6 por ciento de jóvenes de 15 a 29 años y otro de 7.3 por ciento constituidos por niños.

En cuanto a género, hay mayor discapacidad entre las mujeres que entre los hombres ya que la proporción entre las primeras es de 52 de cada cien y en los hombres es de 47.