Saltillo, Coah.

El rescate de los 63 cuerpos de mineros atrapados en la carbonera Pasta de Conchos desde el 19 de febrero de 2006, cuando el yacimiento estalló por acumulación de gas, sería un acto de justicia para la sociedad y el gremio minero, daría tranquilidad a las familias de las víctimas y también la oportunidad de comprobar si la tragedia ocurrió por negligencia, dijo el gobernador Rubén Moreira Valdez. Sabemos que hay la intención del gobierno federal de sacar los restos de estos mineros fallecidos y nosotros nos hemos pronunciado porque eso suceda. Respaldamos la acción de las viudas, de las familias, de sus compañeros de trabajo y en la medida que podamos intervenir lo haremos. El rescate no está en la posibilidad nuestra, no somos autoridad en esa materia, entonces hemos hecho gestión ante la Secretaría del Trabajo para que esto suceda, dijo. El gobierno federal y la empresa concesionaria, Industrial Minera México, suspendieron los trabajos de búsqueda y rescate dentro de la mina en abril de 2007, con el argumento de que la mina estallaría de nuevo y que la descomposición natural de los 63 cadáveres atrapados contaminó el agua del subterráneo.