El Fondo Monetario Internacional (FMI) advirtió este martes que existe incertidumbre respecto del efecto preciso sobre el crecimiento económico de México de las reformas energética y financiera propuestas por el gobierno del presidente Enrique Peña Nieto y que, en el caso del petróleo y electricidad, plantea la posibilidad de permitir la participación del sector privado en actividades que la Constitución reserva ahora al Estado.

En la evaluación anual sobre el desempeño de la economía mexicana, el FMI calificó de impresionante el avance de las ‘reformas estructurales de gran alcance” en el primer año de la administración del presidente Peña Nieto. La dinámica de cambios, aseguró el organismo, señala el compromiso de México para hacer frente a los arraigados obstáculos al crecimiento de la economía. Pocos países, si hay algunos, han emprendido una agenda amplia de reformas económicas, especialmente, apuntó, en el contexto de una amplia coalición de los mayores partidos políticos, en alusión al llamado Pacto por México, donde participan PRI, PAN y PRD, los tres partidos con mayor representación en el Congreso.

En los últimos meses, recordó, han sido aprobadas reformas legales para mejorar la educación pública, hacer más flexible el mercado de trabajo y optimizar la competencia en la industria de telecomunicaciones.

Están a discusión reformas en los sectores de energía y financiero. Estas reformas son una fuente de optimismo y, al revés, un riesgo para la perspectiva de crecimiento de los próximos cinco a diez años. Por supuesto, permanece la incertidumbre respecto de los efectos precisos en el crecimiento y será crucial que sea aprobada rápidamente la legislación secundaria y las regulaciones relacionadas con las reformas para proveer un panorama claro a los inversionistas, sostuvo.

El examen anual

El FMI publicó este martes la evalución anual de la economía mexicana, ejercicio que realiza respecto de cada uno de los 188 países que lo integran, como está previsto en el artículo cuarto del acuerdo de adhesión al organismo.

Actualmente el gobierno mexicano dispone de una línea de crédito flexible que puso a su disposición el FMI en 2009, en el contexto de la crisis financiera internacional, por un monto a valor presente de 73 mil millones de dólares.

El Banco de México no ha utilizado hasta ahora esta facilidad otorgada por el FMI a países con sólidos fundamentos macroeconómicos, que pudieran verse afectados por la volatilidad financiera internacional.

En la evaluación de la economía mexicana que dio a conocer este martes, el FMI mencionó que en el último año, el primero de un gobierno priísta después de 12 años de gestión a cargo del Partido Acción Nacional, el país ha dado continuidad a su política macroeconómica, al tiempo que ha impulsado, dice, una agenda ambiciosa de reformas para fomentar el crecimiento.

Evaluó que la economía mexicana comenzó a operar por debajo de su capacidad, con un crecimiento que al término del año será de una tercera parte de lo previsto en enero, según previsiones oficiales.

Los directores ejecutivos del Fondo Monetario Internacional, responsables de la evaluación, consideraron que los muy fuertes fundamentos de México, el sólido marco de políticas y la hábil gestión macroeconómica han permitido al país hacer frente, excepcionalmente bien, a la volatilidad mundial en los últimos meses, según el reporte.

Al mismo tiempo, señalaron que este año el crecimiento estará por debajo del potencial y que persisten riesgos a la baja provenientes de condiciones externas aún no resueltas. Los directores destacaron el compromiso de las autoridades de mantener políticas macroeconómicas prudentes y de continuar implementando reformas estructurales profundas, acotó.