Martes 26 de noviembre de 2013, p. 33
Disfrazados con batas blancas de médico, un grupo de asaltantes desató ayer por la tarde una balacera que dejó cinco muertos y dos lesionados en las instalaciones del Instituto Nacional de Rehabilitación (Inre).
Los custodios de una camioneta de valores que pretendían abastecer un cajero automático ubicado dentro del nosocomio enfrentaron a los hampones para impedir el asalto.
Los hechos ocurrieron alrededor de las 14:25 horas, cuando al menos cuatro individuos vestidos con batas del hospital y credenciales apócrifas ingresaron al Inre, ubicado en calzada México Xochimilco número 289, colonia Arenal de Guadalupe, delegación Tlalpan, por una salida de emergencia que da hacia Anillo Periférico.
De acuerdo con las primeras indagatorias, el grupo delincuencial avanzó aproximadamente 200 metros hasta la zona donde se encontraba el cajero de HSBC, que es utilizado por los empleados del instituto.
Ficha policial
La Secretaría de Seguridad Pública del Distrito Federal (SSPDF) dio a conocer que tres custodios realizaban la carga de efectivo cuando fueron sorprendidos por los delincuentes, y al repeler el ataque el custodio Carlos Castro, de unos 35 años, murió por impactos de bala en el cuello y el tórax. También perecieron cuatro de los asaltantes.
Tras la refriega, otro de los vigilantes resultó herido en el fémur y la cabeza y fue trasladado a la clínica 32 del Seguro Social. Un custodio fue alcanzado por una bala entre el hombro y la clavícula izquierda, por lo que fue llevado al Hospital de Traumatología Sur.
El coordinador de seguridad del instituto, Rafael Hernández Prado, aseguró a la policía capitalina que los agresores no son parte del personal, a pesar de que uno portaba un gafete que lo acreditaba como auxiliar de enfermeros.
Los uniformados de la SSPDF localizaron cinco armas cortas en el estacionamiento y al menos dos batas tiradas en los pasillos, por lo que se investiga si otros posibles cómplices huyeron.
En el hospital se desataron crisis nerviosas entre los visitantes y empleados del Inre, además de que muchos pacientes de hospitales aledaños fueron desalojados.
El instituto, dependiente de la Secretaría de Salud federal, quedó resguardado por elementos de la Policía Federal, quienes durante toda la tarde de ayer restringieron el acceso.