Marchas en Andalucía y Asturias en repudio a la corrupción
presupuestos antisociales, ayer en BarcelonaFoto Reuters
Lunes 25 de noviembre de 2013, p. 29
Madrid, 24 de noviembre.
Más de 200 mil personas exigieron hoy en Barcelona la renuncia del presidente del gobierno español Mariano Rajoy, al rechazar su política de recortes y la corrupción prevaleciente en su gobierno. Andalucía y Asturias fueron escenario de movilizaciones similares, que se sumaron a las registrada ayer en Madrid
El gobierno Rajoy llegó a la mitad de su mandato en un clima de malestar, descontento e indignación por una gran parte de la población española, en parte de su política de recortes de los servicios públicos básicos y también por los severos efectos de la crisis en el bienestar de la sociedad.
En dos años de gobierno del Partido Popular (PP) todos los indicadores macroeconómicos y de bienestar han empeorado; el desempleo se encuentra en su cota más alta, con 26 por ciento de la población activa, lo que se traduce en alrededor de cinco millones 900 mil personas sin empleo. El porcentaje de pobreza o de población con riesgo de exclusión social se encuentra en su nivel más alto en décadas, con 28 por ciento; mientras que el número de familias que tiene a todos sus miembros en el desempleo y además no reciben ningún tipo de ayuda por parte del Estado supera ya el millón.
Además de las consecuencias económicas en el país provocadas por las políticas neoliberales del gobierno de Rajoy, una parte de la sociedad -movimientos sociales, sindicatos y asociaciones de defensa de los derechos humanos- está preocupada e indignada por las reformas de recorte de derechos. Como la inminente aprobación de la nueva Ley de Seguridad Ciudadana
, que limitará el derecho a manifestarse y contemplará multas millonarias a quienes convoquen protestas frente al Parlamento o a quienes graben a los policías reprimiendo a ciudadanos, entre otras.
Con este panorama, las llamadas mareas ciudadanas
y los sindicatos organizaron una serie de protestas que tuvo hoy su principal epicentro en Barcelona -en Madrid la manifestación se celebró ayer, con mucha menor concurrencia-.
La manifestación de la capital catalana superó los 200 mil asistentes, según las organizaciones convocantes, que se integraron en la Plataforma Prou Retallades (Basta de recortes), formada por movimientos y asociaciones cívicas y sindicatos.
Sus principales reivindicaciones fueron similares a las de las protestas del pasado sábado, es decir para denunciar el cariz de los presupuestos de 2014, los recortes en servicios sociales, la precariedad laboral y la reforma de las pensiones.
En la marcha también se criticó con dureza la obediencia
del gobierno de Rajoy a los criterios neoliberales impuestos desde la Comisión Europea, el Fondo Monetario Internacional y el resto de organismos internacionales que privilegian los recortes frente al deterioro del bienestar de la ciudadanía.
Al frente de la marcha, una de las numerosas en los últimos años, se desplegó un pancarta que rezaba Paremos unos presupuestos antisociales
; a lo largo de la manifestación se escucharon numerosos gritos de dimisión y acusaron al gobierno de Rajoy de estar carcomido por la corrupción, al señalar las últimas evidencias judiciales que confirmaron que el Partido Popular ha tenido a lo largo de los años una contabilidad secreta desde la financiaba sus campañas electorales, pagaba sobresueldos ilegales a sus dirigentes, y administraba las donaciones ilegales que recibía, en muchas ocasiones por empresarios que después eran beneficiados con contratos públicos millonarios.
En Andalucía también fue una jornada de movilizaciones, con marchas en las principales ciudades que congregaron a ocho mil personas en Málaga, a dos mil en Sevilla y tres mil en Granada. Mientras que en Asturias, en la ciudad de Áviles, se manifestaron unas 20 mil personas también para reclamar la dimisión del gobierno por la corrupción y los recortes en Educación y Sanidad.