En lo que va del año, la Secretaría de Desarrollo Social (Sedeso) del Distrito Federal ha brindado apoyo a casi 79 mil mujeres víctimas de violencia familiar, principalmente de las delegaciones Miguel Hidalgo, Cuajimalpa y Tláhuac.

De hecho, según cifras de la Procuraduría General de Justicia capitalina, hasta septiembre pasado se atendió a casi 20 mil mujeres víctimas de algún delito, además de que 300 fueron rescatadas al encontrarse en situación de trata de personas, mientras el número de feminicidios en el mismo periodo fue de 24 casos.

En ese escenario, y en el contexto del Día Internacional para la Eliminación de la Violencia contra las Mujeres y las Niñas, el Gobierno del Distrito Federal (GDF) emprenderá en los próximos 16 días distintas actividades culturales y recreativas, así como foros y talleres.

Dichas acciones comenzarán este lunes con la entrega de tarjetas del Seguro contra la Violencia Familiar, en la que víctimas de este delito reciben una ayuda económica de mil 500 pesos mensuales durante un año.

A la fecha, la Sedeso local ha entregado mil 600 apoyos, cuyo propósito es que las mujeres y sus hijos puedan reiniciar una vida lejos de la violencia.

El programa de 16 días de activismo contra la violencia hacia las mujeres y las niñas se llevará a cabo también en los reclusorios de la ciudad de México, con actividades de orientación jurídica, social y sicológica entre la población penitenciaria, así como entre personal técnico y de seguridad, informó el subsecretario del Sistema Penitenciario local, Hazael Ruiz Ortega.

Precisó que se pondrá énfasis en pláticas y talleres, principalmente en las cárceles femeniles de Santa Martha y Tepepan, y se incluirá una muestra internacional de cine de género, incluso en los centros de reclusión para varones.

La jornada, que incluye actividades artísticas y culturales, se inscribe en la campaña MAR (Mujeres, Apoyo y Respeto), que comienza este 25 de noviembre, para terminar el 10 de diciembre, cuando se celebra el Día Internacional de los Derechos Humanos.

Ruiz Ortega destacó que el objetivo es hacer comprender a la población reclusa el derecho de las mujeres a vivir una vida libre de todo tipo de violencia en todos los ámbitos: familiar, educativo, laboral, comunitario e institucional.