Caracas, 23 de noviembre.

Miles de opositores encabezados por el ex candidato presidencial Henrique Capriles marcharon en Venezuela contra las políticas fiscalizadoras del presidente Nicolás Maduro para enfrentar la crisis económica.

Capriles denunció la detención temporal de uno de sus colaboradores cercanos al comienzo de la protesta, mientras el gobierno de Nicolás Maduro advirtió que la derecha busca generar violencia.

Ataviados con prendas que tenían los colores de la bandera nacional, los simpatizantes de la oposición se concentraron en las principales ciudades de todo el país.

Capriles y los líderes de la oposición corearon consignas contra la ley habilitante, la cual confirió a Maduro poderes para gobernar por decreto durante un año, en momentos en que el gobierno asegura que enfrenta una guerra económica orquestada por la oposición con ayuda de Estados Unidos.

La movilización también sirvió para que miles de venezolanos expresaran sus quejas por la situación cotidiana que vive el país sudamericano.

Maduro llegó a la presidencia de Venezuela a mediados de abril, tras vencer por poco margen a Capriles. Desde entonces ha tenido que enfrentar una inflación que roza 55 por ciento, episodios de desabasto y una criminalidad rampante.

Como estrategia para enderezar la economía, el mandatario ordenó recientemente la inspección de los principales comercios del país para exigirles rebajas hasta alcanzar precios justos, lo cual ocasionó compras de pánico que abarrotaron los centros comerciales.

La oposición ha criticado la ley habilitante y asegura que Maduro la usará para librar una cacería de brujas en su contra.

El jefe de Estado venezolano afirma que las medias permitirán equilibrar la economía. Para ello ya aprobó una norma que limita los márgenes de ganancias de los minoristas y otra que reorganiza la distribución de divisas oficiales en medio del control cambiario.

El viernes por la noche Maduro ordenó detener a dos operadores de partidos opositores, acusados de contactar a gente para que sembrara la violencia durante las manifestaciones del sábado.

Capriles denunció que su jefe de giras fue detenido por militares y liberado horas después.

La jornada nacional de protesta ocurre 15 días antes de los comicios municipales en Venezuela, en los cuales serán electos 335 alcaldes el próximo 8 de diciembre.