Asignar mayor presupuesto a alguna dependencia pública, a cambio de obtener un porcentaje de esos recursos económicos, es práctica que no le es ajena a los diputados de la Asamblea Legislativa del Distrito Federal, quienes han hecho costumbre que cada fin de año –cuando se discute el paquete económico del gobierno de la ciudad– integren una bolsa presupuestal para asignarla de manera discrecional.

Entre diciembre de 2012 y enero de este año, este diario documentó el capítulo más reciente de esas historias, cuando los grupos parlamentarios representados en la ALDF formaron una bolsa de mil 320 millones de pesos, que permitió a cada uno de los 66 representantes populares asignar 20 millones de pesos a la dependencia o delegación que quisieran.

Tal situación llevó a una negociación entre legisladores y jefes delegacionales, en la que estos últimos se comprometían a dar 10 por ciento de esos 20 millones a los diputados que les etiquetaran esos recursos. Eso podría repetirse en diciembre próximo, una vez que empiecen a discutir el Presupuesto de Egresos 2014 del Gobierno del Distrito Federal.

La formación de esa bolsa presupuestal no tiene reglas ni respaldo en la ley; fue creada inicialmente para priorizar proyectos delegacionales, pero se ha ido pervirtiendo hasta llegar a la exigencia, a los jefes delegacionales, de plazas laborales o un porcentaje de ese dinero.

Información proporcionada por los mismos diputados locales revela que de 2009 –año en que se creó esa bolsa– a 2012, las fracciones de la ALDF han reservado, del presupuesto del DF, más de 6 mil millones de pesos para etiquetarlos para proyectos específicos o programas sociales –sin tener facultades para ello–, apoyar a asociaciones civiles con pocas referencias sobre su existencia, o bien, destinarlos a organizaciones sindicales.

Algunos jefes delegacionales, que, como los diputados, pidieron el anonimato, ratificaron que en diciembre pasado, mientras se discutía el paquete económico del GDF, tuvieron que disputarse las simpatías de los 66 diputados para que les asignaran esos 20 millones de pesos, que ofrecían al mejor postor.