Acepta que es un delito de gran impacto para los que lo sufren
En aumento, las bandas de colombianos
Ubicadas, las zonas de acción
Martes 19 de noviembre de 2013, p. 35
El titular de la Secretaría de Seguridad Pública del Distrito Federal, Jesús Rodríguez Almeida, con estadísticas e informes policiales en mano asegura que el robo a casa habitación en la ciudad de México ha disminuido. Y aunque así lo corroboran las cifras de otras dependencias, también acepta que es un delito de gran impacto para aquellos que lo sufren.
En entrevista, el funcionario afirma que ha llegado mucha gente de otros países a cometer ilícitos a la capital del país. Advierte sobre el aumento de bandas de colombianos que se dedican al robo a casa habitación y el asalto a cuentahabiente en motocicleta.
Muchos vienen juntos y hemos detectado que la mayoría entra legalmente a México. Gracias a la colaboración ahora con el Instituto Nacional de Migración, sabes qué domicilios tienen y cuánto tiempo han permanecido aquí
, señala.
Rodríguez Almeida sostiene que la SSPDF tiene perfectamente ubicadas las zonas de acción de las bandas de robo a casa habitación y que mantienen reuniones periódicas con los vecinos para tener comunicación directa y atender cualquier llamado de emergencia.
Detalla que en los meses recientes se ha detenido casi cada fin de semana a bandas dedicadas al robo a casa habitación como resultado de esta colaboración.
Una de las últimas bandas detenidas incluso tenía un gimnasio en Vallejo, donde se reunían. Lo fueron construyendo con base en el producto de sus robos. Son cinco personas relacionadas con al menos 10 averiguaciones previas, pero ya se desarticuló
, asegura.
Uno de los factores que ha contribuido a la propagación de este delito, además de la vigilancia por los ladrones, es que las personas no verifican la información y antecedentes laborales del personal que contratan y algunas veces tienen poco cuidado en la seguridad de puertas y ventanas.
El personal puede tener cinco o 10 años trabajando con ellos y a veces no saben ni su domicilio, ni con quién se juntan y, cuando son mujeres, si tienen novios. A veces las enamoran malandrines para sacar información y perpetrar los robos
, dice.
Asimismo, hay zonas que favorecen la falta de visibilidad o los accesos. Hay áreas residenciales que incluso dan a barrancos o son tan grandes que la visibilidad es escasa o nula, advierte.
Rodríguez Almeida alerta que estos delitos se cometen principalmente los viernes, sábados y domingos, cuando la gente sale y el flujo de personas es mayor, por lo que pidió a los afectados acercarse a la SSPDF para trabajar en colaboración.