La Policía Bancaria e Industrial, así como personal de seguridad privada, contratados por centros y plazas comerciales, vigilan las tiendas para evitar asaltos a negocios y personas que acuden a realizar sus compras por las ofertas de El Buen Fin.

Sin embargo, si a algún cliente le toca la mala suerte de que lo roben afuera del establecimiento, los encargados de la vigilancia no asumen responsabilidad alguna, informaron jefes de seguridad de centros comerciales.

Para no correr riesgos, los capitalinos han tomado sus propias previsiones, como evitar utilizar grandes cantidades en efectivo, solicitar que la mercancía adquirida sea trasladada a sus vehículos por personal de la tienda y no perder de vista las tarjetas de crédito al momento de los cobros, para que no se hagan cargos indebidos o clonaciones.

Emilia Alarcón, vendedora de artículos deportivos, comentó que la mayoría de la gente realiza sus pagos con tarjetas de crédito, precisamente para evitar asaltos. Además, nosotros tenemos como requisito de la tienda identificar a los clientes, porque con tanta gente si llegamos a tener casos con plásticos falsos.

La joven, con cinco años de experiencia como cajera, platicó que algunos que usan tarjetas clonadas aprovechan que las filas son largas, ya que por la carga de trabajo algunos compañeros no identifican bien al cliente.

La Secretaría de Seguridad Pública del Distrito Federal (SSP-DF) informó que la vigilancia que realiza, con 28 mil policías, sólo es en la vía pública y calles aledañas a los centros comerciales, la cual fue reforzada desde el pasado viernes. No obstante, señala, si hay alguna solicitud o denuncia de particulares, porque se cometa algún delito adentro de los negocios, se actúa a petición de parte, informaron.

En el centro comercial Plaza Coyoacán, así como en Perisur, algunos encargados de la seguridad expusieron que hay vigilancia interna. Además de las cámaras de seguridad instaladas adentro de los almacenes y al salir de los estacionamientos, hay personal que pregunta a los clientes si todo está bien.

Un vigilante, que sólo se identificó como Rubén, dijo que recorren todos los pasillos para detectar personas sospechosas, a quienes se clasifica si que pasan mucho tiempo en el interior de las plazas sin hacer compras, que observen por espacios prolongados aparadores o pasen varias horas frente o dentro de una tienda.

También observan la ropa que vistan, que no siempre es una señal, pero que traigan gorras y lentes oscuros es clave, aseguró. Al cierre de esta edición la SSP-DF informó que había saldo blanco en el segundo día de El Buen Fin.