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Perdimos casa y cosechas; sólo nos alcanzó para una ofrenda humilde
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Perfecta Flores colocó una ofrenda en memoria de sus dos hijas, su nieta y su papá, que murieron el pasado 15 de septiembre en el poblado El Tejocote, municipio de MalinaltepecFoto Cortesía Arturo de Dios Palma
Corresponsal
Periódico La Jornada
Sábado 2 de noviembre de 2013, p. 25

Malinaltepec, Gro., 1º de noviembre.

Perfecta Flores Pacheco se prepara para ir al panteón. Antes, en una mesa de madera coloca su ofrenda con veladoras, pan y refrescos en honor a sus dos hijas, una nieta y su padre, que murieron cuando se desgajó el cerro sobre su vivienda en la comunidad de El Tejocote, en septiembre pasado.

En el Tejocote viven más de 2 mil personas; está enclavado en la zona me’phaá (tlapaneca), de este municipio, en la Montaña Alta, y fue el más dañado por las lluvias provocadas por los meteoros Manuel e Ingrid.

El frío cala cuando entra por las rendijas de la casa de madera, con piso de tierra. El olor a cera contrasta con el de las flores, y el café que prepara otra de sus hijas. Doña Perfecta se sienta a un costado de la ofrenda que no tiene fotos de sus difuntos, y cuenta que al quedarse sin casa, no le quedó nada .

En la colonia Monte Pirámide se cayeron cuatro casas, la mía, la de mis hermanos y la de una sobrina. Dicen que hay 400 damnificados. El viernes 13 de septiembre empezó la lluvia, y continuó el 14 y el 15. Ese domingo estaba en mi casa con mis hijos y mi nieta, cada quien en su cuarto. El 15, cuando fallecieron mis hijas, yo estaba dormida, eran como las tres de la madrugada cuando se oyeron ruidos, me quise levantar, pero me cayó tierra encima. Yo estaba con mi hija de 8 años, y ya no me pude salir, pero pedí auxilio a mis hermanos que vivían cerca.

Dijo que a su llamado llegaron sus sobrinas y sus hermanos, que empezaron a escarbar en plena lluvia, pero otra avalancha de tierra vovió a caer. Más vecinos ayudaron y todo ese día trabajaron hasta que rescataron los cuerpos de sus hijas y su nieta. Agrega que su padre, de 92 años, murió de tristeza al otro día, a causa del deceso de sus familiares.

Este sábado, comenta: Vamos a ir al panteón a llevarles sus flores, mientras les pusimos su ofrenda, muy humilde, porque no tenemos dinero, casa, ni maíz. Perfecta Flores dice que tiene mucho dolor y clama ayuda porque tiene otros cinco hijos que mantener.