Continúa la renovación de su flota
Viernes 4 de octubre de 2013, p. 20
La Armada de México tiene el objetivo de continuar durante este sexenio la renovación de su flota, con la construcción de 60 embarcaciones, y reactivar la industria naviera nacional –junto con la iniciativa privada– gracias a un convenio suscrito con Pemex para la fabricación de 22 naves, en una operación que supera 3 mil 200 millones de pesos.
Además impulsa un proyecto para que dependencias del Ejecutivo federal apoyen la renovación de la flota pesquera nacional con la construcción de unas 800 embarcaciones en los próximos años, en una operación en la que se pretende también la participación de capital privado.
Lo anterior fue informado por el vicealmirante José Antonio Sierra Rodríguez, director general de Construcciones Navales de la Secretaría de Marina, quien agregó que se prevé que la inversión total para construir las 60 embarcaciones que requiere la Armada en los próximos años sume 10 mil millones de pesos.
El vicealmirante Sierra, quien lleva cinco años en el cargo, destacó la importancia de la construcción naval como factor detonador de empleos y de crecimiento económico, y lamenta que actualmente los astilleros de la Armada trabajen a 45 por ciento de su capacidad, principalmente dedicados a mantenimiento, en lugar de construir barcos.
Agregó que en 2013 se ejercerán 360 millones de pesos, mientras que el proyecto de presupuesto para el año próximo contempla una partida de mil 800 millones.
Por ejemplo –dijo en entrevista con La Jornada, efectuada en sus oficinas–, tenemos remolcaderos de 60 años de antigüedad que ya deben ser sustituidos
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Comentó que una de las novedades impulsadas por el alto mando es construir por primera vez buques logísticos, que se dediquen a llevar a las islas del país los víveres, materiales y equipos que necesitan.
Actualmente las patrullas océanicas cumplen esa función, además de la encomienda que tienen de vigilar las aguas nacionales. La idea, indicó, es que estos buques de guerra se dediquen de pleno a su función.
Sostuvo que los buques que se construyen en los astilleros navales están a la altura de navíos similares de otras naciones y que salvo los motores y la electrónica, la mayoría de sus componentes son de fabricación nacional. “Las embarcaciones construidas por nosotros –señala orgulloso– cuestan 10 por ciento menos de lo que costaría adquirirlas en el extranjero.”