Tampico, Tamps., 18 de septiembre.

El presidente Enrique Peña Nieto dio a conocer que hay 58 personas desaparecidas en la comunidad La Pintada, en el municipio de Atoyac de Álvarez, Guererro, a consecuencia de un deslave.

Agregó que el reporte de la Secretaría de Gobernación señala que el deslave sepultó a una parte de esa pequeña comunidad, y de los 58 desaparecidos no se sabe si están bajo el lodo provocado por ese deslizamiento de tierra.

Agregó que existe alerta ante la creciente posibilidad de que el huracán Manuel golpee Sinaloa y que la depresión tropical 95-L se convierta también en huracán y afecte en el territorio mexicano, particularmente el sureste.

No descartó posponer o incluso cancelar el viaje programado entre el 21 y el 25 de este mes a Nueva York, para asistir a la apertura de la Asamblea General de Naciones Unidad, así como a reuniones de carácter bilateral y una más con jefes de los estados que forman la Alianza del Pacífico.

Quiero afirmar que no obstante esos compromisos, no me alejaré y menos dejaré de atender la contingencia, y de ser necesario pospondré o cancelaré estos actos de carácter internacional. Mi mayor atención es a la contingencia y a prestar toda la asistencia del gobierno para apoyar a la población en condición de desastre, puntualizó.

Peña Nieto encabezó en el aeropuerto de Tampico una reunión de evaluación, en primera instancia sobre los daños del huracán Ingrid a Tamaulipas y Veracruz, donde estuvieron presentes los gobernadores de ambas entidades.

En todo momento, el Ejecutivo resaltó la coordinación de la administración federal con los gobiernos de los estados donde se han producido inundaciones, y de nuevo dijo que las autoridades están preparadas, organizadas y coordinadas para hacer frente a los daños catastróficos ocurridos en los días recientes.

En la reunión intervinieron, además de los gobernadores de las entidades afectadas, los secretarios de la Defensa, Salvador Cienfuegos, y de Marina, Francisco Soberón, así como el titular de la Conagua, David Korenfeld.

Horas antes, en el municipio de El Mante, Peña Nieto se reunió con los habitantes de los ejidos El Limón y 20 de Noviembre, quienes tuvieron que abandonar el martes pasado sus casas con el agua hasta el pescuezo. “¡Tranquilícense, ténganme confianza!’’, repetía sin cesar el Presidente.

De acuerdo con el alcalde de El Mante, Humberto Flores –en la zona cañera del estado, donde las temperaturas llegan con frecuencia a los 35 grados centígrados–, se perdieron entre 500 y 600 casas, hay más de 2 mil damnificados y, ahora que ha dejado de llover, el nivel del agua ha descendido, pero no han disminuido la angustia ni la desolación.

La comitiva presidencial llegó en helicóptero procedente de Tampico al campus local de la Universidad Autónoma de Tamaulipas, habilitado como albergue. El lugar se convirtió de pronto en una caótica mezcla de mitin político y refugio de damnificados por el huracán Ingrid.

Mientras el mandatario buscaba conocer de primera mano los testimonios de las pérdidas, por ahí le echaban porras, por allá exclamaban: aquí somos puro PRI, y a cada paso le pedían fotografiarse con él.

El Presidente anunció que se levantará el censo de damnificados y de bienes perdidos. Se comprometió a que todo será reconstruido, y afirmó que hay total coordinación entre los gobiernos federal, estatal y local.

Pidió a los damnificados no dejarse engañar por quienes quieren sacar ganancia política en estas circunstancias.

La jornada de Peña Nieto inició en Pesquería, Nuevo León, donde aseguró que el gobierno federal encabezará la reconstrucción de la infraestructura perdida por el paso de Manuel e Ingrid, y aseguró: estos eventos climáticos no van a frenar ni a causar parálisis al desarrollo del país.

Luego de inaugurar un complejo industrial de fabricación de lámina galvanizada para el sector automotriz, resaltó el carácter y la capacidad de los mexicanos para sobreponerse a las contingencias y seguir trabajando por el progreso del país.

“No son estos –indicó– momentos para desmotivarnos; al contrario, frente a la adversidad debemos tener firmeza, carácter, entereza y todo lo necesario para seguir adelante.”