Santiago de Chile, 14 de septiembre.

El cantautor y dramaturgo chileno Víctor Jara murió hace 40 años acribillado a balazos (su cuerpo presentaba 44 tiros), luego de una semana de torturas y un frustrado intento por resistir con estudiantes el golpe encabezado por el general Augusto Pinochet.

¡Cuánta humanidad con hambre, frío, pánico, dolor, presión moral, terror y locura!, escribió en un papel arrugado que manos anónimas lograron sacar del estadio Chile, el centro de torturas donde pasó sus últimas noches con otros miles de detenidos.

El que fuera líder estudiantil Osiel Núñez, que el 11 de septiembre de 1973 encabezó la resistencia al golpe en la Universidad Técnica del Estado, narró que el artista tuvo conciencia de que sería asesinado.

Sobre todo cuando fue separado del grupo de presos y obligado a ir al subterráneo del estadio que hoy lleva su nombre, explicó el hoy ingeniero.

En ese momento lo miré a la cara y ambos supimos que lo iban a matar, a todos los demás nos estaban sacando del estadio para llevarnos a otros lugares de detención, evocó Núñez.

Durante el juicio por el crimen, el conscripto Víctor Pontigo también detalló ese momento, en que él toma del brazo al cantante y lo conduce ante los oficiales Roberto Souper, Raúl Jofré, Edwin Dimter, Nelson Hasse y Luis Bethke.

Llevé a Víctor Jara a declarar con los tenientes y después de unas tres horas escuché disparos, le pregunté al conscripto José Cáceres de dónde venían y me señaló que habían matado a Víctor Jara, relató ante el juez.

Jara, cuyos temas inmortalizaron Joan Manuel Serrat, Mercedes Sosa y Pablo Milanés, entre otros, fue asesinado ese 16 de septiembre de 1973 junto al militante comunista Litre Quiroga, director de prisiones del gobierno de Allende.

Víctor Jara también realizó coreografías y trabajos teatralesFoto Archivo

Su cuerpo fue arrojado anónimamente a la morgue, donde fue reconocido por un funcionario, quien alertó a su viuda, la inglesa Joan Jara, para que pudiera enterrarlo clandestinamente.

En 2009, unos extensos 36 años después, un juez ordenó la exhumación del cuerpo para someterlo a pericias y la fila de chilenos que rindieron tributo a Víctor Jara en su entierro definitivo y público alcanzó unas 50 cuadras (5 mil metros).

El homenaje mayor lo recibió ese día el artista cuando su féretro arribó a la Pérgola de las Flores, a un costado del río Mapocho, donde un millar de personas, tras horas de espera, lanzó claveles rojos a su paso, en un acto de honor sólo reservado a los grandes chilenos.

Víctor, eres de los que nunca mueren, rezaba uno de los carteles presente en el acto, en el que destacaban vestidos de naranja los ex estudiantes supervivientes de la Universidad Técnica del Estado.

Hijo de campesinos del sur de Chile, Víctor Jara fue un intelectual comunista que apoyó el gobierno socialista de Salvador Allende (1970-1973), derrocado por el golpe militar liderado por el general Augusto Pinochet, fallecido en 2006.

Icono de la canción de protesta, el autor de Te recuerdo Amanda y Plegaria del labrador también realizó coreografías y trabajos teatrales, convirtiéndose junto a Violeta Parra en el más destacado músico popular chileno.