Llama a unirse al clamor internacional por su liberación
Sábado 14 de septiembre de 2013, p. 13
El embajador de Cuba en México, Dagoberto Rodríguez, convocó anoche a sumarse al clamor mundial por la liberación de los cinco cubanos detenidos en Miami acusados de terrorismo.
Al participar en el primer encuentro internacional entre las juventudes del PRD y la Unión de Jóvenes Comunistas de Cuba –realizado en el Centro Cultural Benemérito de las Américas, en Coyoacán– el diplomático recordó que el caso ha despertado la solidaridad en el mundo, tras 15 años de encarcelamiento injusto.
Citó que en más de 100 países hay más de 400 comités por la liberación de Gerardo Hernández, Antonio Guerrero, Ramón Labañino y Fernando González, luego de que René González, cumpliera con la pena impuesta por la justicia estadunidense.
El embajador resaltó que personalidades de todo el mundo, políticos, parlamentarios, intelectuales, estudiantes, deportistas famosos, más de 10 premios Nobel han expresado mediante llamados enérgicos la necesidad de que se restituya la justicia y los compañeros sean liberados y vuelvan a su patria, a su casa con sus familias
.
Hasta ahora el gobierno de Estados Unidos no ha escuchado ese clamor, y no es algo raro, porque se trata de gobiernos imperiales que poco respetan la opinión del mundo
, afirmó.
Aún así creo que hoy en día todas las personas con principios morales, éticos, de justicia social, deben levantar su voz en favor de la causa de nuestros cinco compañeros
, añadió.
El embajador agregó: Tenemos que movilizarnos todos, convirtiéndonos cada uno de nosotros en un comité por la liberación de los cinco; usar todos los medios a nuestro alcance, llamar a la prensa, usar las redes sociales. En cada espacio que tengamos levantar nuestras voces, escribir cartas, mensajes a las autoridades estadunidenses; difundir el caso por todas las vías y lograr que ese clamor en más de 100 países se convierta en un gran ruido que finalmente haga que el gobierno de Estados Unidos tome la decisión adecuada
, subrayó.
En el encuentro se repartieron cintas amarillas entre los participantes, mismas que amarraron, al igual que el diplomático, en árboles del jardín Centenario, en señal de demanda por el retorno de los detenidos a Cuba.