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En noviembre, el espacio alojará a productores que trabajan con ética sustentable

El Museo Universitario del Chopo será sede del proyecto autogestivo CACAO

Ayer, la cooperativa impulsada por José Miguel González Casanova, entregó becas

 
Periódico La Jornada
Sábado 31 de agosto de 2013, p. 5

En noviembre de este año, el Museo Universitario del Chopo será la sede de un tianguis de productos y servicios culturales autogestivos provenientes de la Cooperativa Autónoma de Comercio Artístico de Obras (CACAO), proyecto impulsado por José Miguel González Casanova, que este viernes entregó becas de producción a 11 propuestas seleccionadas por un jurado.

CACAO es un proyecto muy amplio en el que van a participar más de 100 productores, adelantó González Casanova en una conferencia de prensa realizada en el recinto universitario. Los primeros 33 productores cuentan con una beca de producción de 30 mil pesos cada uno: 11 son productores culturales como editores, talleres de gráfica, huerto urbano, etcétera; 11 son artistas que trabajan el tema de arte y economía, y el resto fue seleccionado en concurso público, los cuales se dieron a conocer este viernes.

Todos tendrán una presencia importante en el Museo del Chopo entre el 15 de noviembre y el 15 de diciembre, mediante un tianguis, trueque de productos, además de que se realizarán talleres y también funcionará como una fábrica, indicó González Casanova.

El jurado estuvo integrado por Alejandro Magallanes, Óscar Adad, Tania Aedo, Ibis Hernández Abascal, Lily Foster, Óscar Hagerman y Sophie Massun, quienes seleccionaron proyectos de artes visuales (Trans+accion, Revista de publicidad y MUM:O Modelo Urbano Molecular Offline), artesanía y diseño industrial (Tu nombre es una joya, Ixchel, la toalla femenina ecológica), diseño gráfico y editoriales independientes (Merma y Ediciones tarántula), diseño textil y de moda (Escenarios de trueques e intercambios para un próximo desliz), gastronomía y huertos urbanos (Pitayas), música independiente (La marchante selecta & La orquesta multicolor: Rizoma sonoro de intersaberes) y en tecnología social (Fábulas sonoras).

Además, se hicieron menciones honoríficas a seis proyectos más en las áreas de artes visuales y tecnología social, artesanía y diseño industrial, diseño textil y de moda y en gastronomía y huertos urbanos.

A estos 33 productores se les sumarán otros que no tendrán beca para la producción específica de productos destinados al tianguis/exposición, sino que participarán con productos que ya tengan realizados. Dentro del tianguis funcionará una moneda interna para el trueque de productos y servicios.

CACAO, cooperativa que se constituirá legalmente, tiene entre sus intenciones la sustentabilidad de la producción cultural, generar modelos alternativos de producción y consumo, de integración de la producción y distribución, comunicación entre productores y distribuidores, buscar modelos alternativos que funcionen dentro de la economía establecida y para dar sustentabilidad a los productores culturales de todos los ámbitos.

Los objetivos con los que nace CACAO son no explotar ni al hombre ni a la naturaleza, tener un sentido ecológico desde la extracción de la materia prima hasta el momento en que el objeto pierda su vida útil y sea desechado; procurar la relación de calidad del objeto y el reciclaje, no generar productos que contaminen la naturaleza, el cuerpo y la mente; establecer formas de relación horizontales en los procesos de producción, distribución y consumo; integrar producción y consumo en un diálogo equitativo con el reconocimiento de todos los participantes; formar equipos de trabajo, cooperativas, asociaciones productivas, creativas, comercio justo, intercambiar con equidad, crear formas de conocimiento desde la concepción hasta el consumo del producto, y contará con un sitio web para promover la producción de los integrantes de la cooperativa.

CACAO encuentra un espacio de trabajo dentro de las instalaciones del Museo Universitario del Chopo al integrarse dentro de dos de las cuatro líneas de trabajo que maneja el recinto.

Una es escenas subterráneas y heterodoxas, dispositivos tecnológicos, redes sociales (entendiendo por éstas la generación de circuitos de distribución y no las de Internet) y economías creativas; la segunda es diseño, espacio urbano y arquitectura, explicó José Luis Paredes Pacho, director del museo.