Al medallista olímpico Bernardo Segura le pareció una cachetada con guante blanco la que asestó el entrenador Rodolfo Gómez a los fondistas mexicanos, con el triunfo del peruano Raúl Pacheco en el Maratón de la Ciudad de México del domingo pasado.

Rodolfo ya no pudo trabajar aquí (en México) y se fue a Perú, donde preparó a este competidor, para que ahora ganara el maratón. Eso es darle una cachetada con guante blanco a los maratonistas del país y una demostración que de los entrenadores mexicanos sí podemos trabajar a nuestros atletas, razonó el ahora preparador de los marchistas Ever e Isaac Palma.

Aunque no quiso profundizar más sobre el caso de Rodolfo Gómez, el ex diputado federal y ex director del Instituto del Deporte del Distrito Federal expuso que la marcha en el país tocó fondo (con los malos resultados en el Mundial de Rusia), por lo que urge hacer un trabajo de salvamento, que requiere acabar con los egos para que gane no un competidor en particular, sino la marcha del país en general.

Al mando de la preparación de los andarines Palma, el ex marchista, con estudios de licenciatura en entrenamiento deportivo, aseguró poder llevarlos a pelear por las medallas en los Juegos Olímpicos de Río 2016, para lo que sólo necesito un fisiatra de planta y dos campamentos de altura al año, además de las competencias donde puedan probarse.

En su primer día de entrenamiento con ambos competidores, quienes tuvieron un fuerte desgaste por acudir a la Universiada Mundial y luego al Campeonato Mundial de Atletismo, ambos en Rusia, ahora deberá dosificar el trabajo de manera adecuada.

Explicó que sus pupilos deberán mantener un tiempo constante de alrededor de 1:20 horas para poder participar en el Challenge de Chihuahua del año próximo, de donde saldrán los competidores que luego tendrán una gira por Europa durante un mes, además de hacer un buen papel en los Juegos Panamericanos de Toronto 2015, para aspirar a obtener su pase a la justa brasileña.