Antonio Torres Servín, quien esta semana recibió un voto de confianza para estar al frente del timón en Pumas, reconoció que el estadio Olímpico Universitario ya no pesa ante los rivales, lo cual enmarcó entre otro de los objetivos por recuperar en la debacle del cuadro auriazul, de lo que se dice convencido que sucederá a partir del encuentro de este domingo contra León.

Estamos apenados por como estamos en la tabla. Tenemos que mejorar y manejar la presión, que tomamos para bien. Es futbol profesional, jugamos en Pumas. La asimilo de buena manera y tengo la seguridad de que saldremos adelante para que nuestra gente esté menos intranquila, indicó el técnico al concluir la práctica de ayer en el estadio.

Torres Servín, quien no ha ganado en cinco jornadas y marcha penúltimo en la tabla general –con dos empates (dos puntos), sólo delante del Atlante–, señaló que la directiva no le estableció plazos para dar resultados.

No se nos ha dado el triunfo, pero sabemos que estamos a tiempo de corregir el camino, que faltan 12 partidos. La presión siempre existirá y hay que saberla manejar, señaló.

Al comentario de que CU ya no pesa para ganar los partidos, el timonel respondió casi indolente: Si me preguntas de este torneo, puedo decir que no, pero ese es otra de las metas y una de ellas es volver a hacer que nuestra casa pese.

Mario Trejo, recientemente reinstalado como vicepresidente deportivo del club, indicó que el cuadro universitario está desgastado por la falta de resultados, y habló de la necesidad de echar mano de los hombres de experiencia para salir adelante.

Precisó que será importante hablar con los jugadores y con los más jóvenes también. Nos urge ganar. Nada más hay que retomar lo que este equipo hizo en temporadas anteriores, cuando se lograron cosas muy importantes.

Por último, informó que se extenderá a dos semanas más la recuperación de Martín Romagnoli, quien tiene una fascitis plantar.