Miércoles 24 de julio de 2013, p. 41
Chicago, Illinois., 23 de julio.
Nueve jóvenes indocumentados mexicanos (activistas dreamers) reingresaron a Estados Unidos este lunes, país en el que crecieron y estudiaron, pero ahora sin visa ni documento migratorio, iniciando así un acto de protesta y provocación insólito que ha destapado una nueva etapa en el proceso migratorio de Barack Obama.
Los oficiales fronterizos permitieron el ingreso de los activistas mexicanos a territorio estadunidense y fueron trasladados al Centro de Detención de Florence, Arizona, y posteriormente al de Eloy, donde podrían ser encarcelados seis meses. Sin embargo, creemos que en unos días saldrán libres y habremos doblado al sistema migratorio estadunidense
, aseguró a La Jornada Mohammad Abdollahi, vocero de la National Immigrant Youth Alliance (NIYA), organización a la que pertenecen los Dreamers.
Tres de estos jóvenes desafiaron las leyes, políticas y advertencias de la administración de Barack Obama que les exigía residir en territorio estadunidense ininterrumpidamente al tomar un avión desde Estados Unidos hacia la ciudad de México la semana pasada.
Los otros seis jóvenes nacieron en México, pero han residido toda su vida en Estados Unidos; sin embargo, regresaron a su país frustrados al no poder convertirse en residentes legales
antes de diciembre de 2011 y, por tanto, no son elegibles en el nuevo esquema de regularización migratoria.
Se trata de unificar fuerzas, de no excluir a los que se fueron, de cuestionar la voluntad del presidente quien puede utilizar su poder de veto ejecutivo para dar moratoria a las 1.7 millones de deportaciones en su administración
, aseguró Nico González, vocero de la NIYA en Chicago.
Ante el anuncio de que los nueve jóvenes intentarían cruzar la frontera por la garita de Nogales, Sonora, otros 30 dreamers se presentaron en el lugar y algunos intentaron incorporarse al plan de los activistas e ingresar a Estados Unidos. Todos fueron detenidos por los oficiales fronterizos y ahora están libres, aseguró la NIYA.
Los mexicanos seguían detenidos en Arizona hasta el cierre de esta edición. Los abogados que colaboran con la NIYA explican que no se descarta una petición de asilo político en Estados Unidos si la situación empeora; sin embargo, confían en que Obama utilizará su poder de veto de discreción para dejarlos ingresar a su país.