Discutirá enmienda para vigilar sólo a personas bajo sospecha
Miércoles 24 de julio de 2013, p. 30
Washington, 23 de julio.
La Cámara de Representantes de Estados Unidos discutirá la suspensión de los programas de inteligencia realizados por la Agencia de Seguridad Nacional (NSA, por sus siglas en inglés), con los que se espía a los ciudadanos estadunidenses, pero el Senado sostuvo que la iniciativa es imprudente
.
Un puñado de demócratas liberales se unieron a los conservadores del Tea Party en apoyo a una enmienda para poner fin al espionaje practicado por la NSA sobre estadunidenses que no son objeto de una investigación en curso.
El republicano Justin Amash presentó la solicitud en la que exige que en el futuro las tareas de vigilancia realizadas por el gobierno sólo sean permitidas si están dirigidas contra personas que ya se encuentran bajo alguna sospecha. De esta manera, la propuesta apunta a limitar el control masivo de conversaciones telefónicas y a reducir la vigilancia de datos que circulan en Internet.
En caso de contravenir estas disposiciones, la NSA debería sufrir recortes presupuestarios, sostiene la propuesta, que se remite exclusivamente a las labores de espionaje realizadas dentro de Estados Unidos.
Mi enmienda bloquea financiamiento para el registro de datos personales de la #NSA si la información no pertenece a una persona sujeta a investigación
, afirmó Amash en su cuenta de Twitter.
Además, Amash agradeció también a través de esa red social al presidente de la cámara baja, John Boehner, que haya presentado la enmienda, adosada al proyecto de gastos de defensa bajo consideración, para que sea debatida esta semana.
Los demócratas John Conyers y Jared Polis apoyaron la enmienda de Amash, al considerar que asegura que información sobre estadunidenses inocentes caiga innecesariamente en una base de datos del gobierno
.
Pero la demócrata Dianne Feinstein, presidenta del poderoso comité de Inteligencia del Senado y el republicano de mayor rango de la comisión, Saxby Chambliss, emitieron una firme advertencia sobre la enmienda. Ambos aseguraron a los congresistas que el programa de recolección de datos está bajo estricto control
y ha sido autorizado por los tres poderes del Estado.
Cualquier enmienda para desfinanciar el programa por medio de reglamentación de gastos sería imprudente
, advirtieron. Según el Huffington Post, el director de los servicios de inteligencia, Keith Alexander, hizo lo posible, en un encuentro estrictamente confidencial, por frenar el avance de este tipo de propuestas.
Sería la primera votación sobre las facultades de la NSA que tendría lugar en el Congreso desde las revelaciones hechas por el ex contratista Edward Snowden, el pasado 5 de junio sobre los programas de espionaje estadunidense a los diarios The Washington Post y The Guardian.