l pasado jueves ganaron
tres empresas en un concurso de Pemex preparado durante siete meses, en Chicontepec. Ahora se llaman mejor Contratos Integrales. Se les ha llamado por las mismas personas, los que se concursan, campos maduros
.
Por lo visto, ya no quieren que se oiga tan feo, pero eso no quita que sean campos agotados, caducos o como les quieran llamar. No se aclara en la información cuánto durarán los contratos, que en casos similares previos fueron de 25 y 30 años. Eran seis campos, pero tres se quedaron desiertos. Cómo estarán las cosas.
Se anuncian estos territorios como la cantidad de reservas de millones de barriles de equivalente de petróleo crudo. Y lo curioso es que los campos ganadores
del concurso son las que menos crudo tienen oficialmente: Soledad, 134; Miquetla, 248 y Humapa, 341. Y las tres perdedoras
fueron: Pitepec con mil 46, Hiahiapan con 431 y Amatitlán, con 993. Esto indica que los concursantes no se toman muy en serio las cifras petroleras de los funcionarios de Pemex, al dejar en el tiradero a las que oficialmente más petróleo tenían.
De por sí las reservas de Chicontepec son poco confiables. Las reservas en total de crudo el primero de enero pasado fueron oficialmente en ese lugar de 10 mil 714 millones de barriles. Pero las reservas probadas en la misma fecha fueron 637 millones, o sea 6 por ciento del total. Pero los funcionarios manejan en todo su lenguaje las cantidades globales, incluidas las que tienen, según ellos, 50 por ciento de posibilidad de existir, y de las de 10 por ciento de posibilidad, las más numerosas, ni hablamos. Ellos, los funcionarios, escriben recursos prospectivos
, cuya posibilidad, francamente hablando, es cero
.
En comparación, un cuadro de Pemex en el sureste, la zona que tiene más petróleo en serio, de un total nacional de 13.8 miles de millones de barriles equivalentes, probados, hay 12.1 del sureste, y de toda la zona de Chicontepec (Tampico y Misantla) tiene uno, y es el 0.7 por ciento del total.
Hace unos meses se confirmó que en Chicontepec el promedio es de 27 barriles de crudo diarios por pozo. En varias regiones del sureste es frecuente que los pozos que se perforan produzcan miles de barriles de petróleo diarios.
Algunos ejemplos son los 5 mil 600 iniciales del pozo Kinbe-1, y Pareto, con 4 mil barriles iniciales diarios y 43 grados API, o sea crudo súper ligero.
También es ejemplo el de Tsimin, con los mismos 43 grados, que se inició en agosto pasado con 7 mil 400 barriles súper ligeros diarios. Otro ejemplo es Navegante, en Samaria-Luna, en la región sur, y que comenzó con aceite ligero por mil 770 barriles diarios.
No hay comparación de estos y otros pozos con los 27 barriles diarios promedio de cada pozo de Chicontepec.
Veamos el gastadero de dinero por quienes manejan la administración de Chicontepec. El presupuesto que se asignó para 2012 fue oficialmente de 18 mil 964 millones de pesos. Lo que gastaron en realidad fue 29 mil 674 millones. Es decir, más del doble de lo que debieron gastar.
Como comparación, el Litoral de Tabasco tenía de presupuesto 7 mil 892 millones también para 2012, pero en los hechos les dieron sólo 3 mil 746 millones, o sea poco menos de la mitad de lo que debieron recibir del centro de Pemex. En cambio, el Litoral produjo en ese año 319 miles de barriles diarios; en cambio Chicontepec produjo 69 mil barriles, casi una quinta parte de la producción del Litoral. Lo que gastó el Litoral fue poco más de una décima parte de lo derrochado por Chicontepec.
Eso sí, los funcionarios de Chicontepec presuponen que siempre están produciendo más que antes. Pero lo que vemos sobre los meses del actual año es muy distinto. Lo programado oficialmente es un aumento constante cada mes, desde 79 mil barriles diarios en enero, que estaría subiendo a 91 mil ahora en junio, y que en diciembre sería de 105 mil.
Pero la producción real es muy diferente. Es una reducción cada mes, hasta 67 miles de barriles en junio, con una baja en lo que va del año al 74 por ciento. Esa es la realidad.
Esta baja en la producción de Chicontepec tiene dos componentes. Primera, porque cada pozo, en promedio, declina muy rápido. Segunda, los últimos cuatro meses en que se publicó –febrero a mayo– tuvieron 13 pozos al mes, cuando que el año pasado se perforaron 53 pozos al mes de promedio.
Los funcionarios relacionados no dejarán de presumir de Chicontepec como si fuera un gran beneficio. Pero la realidad es sólo una, y la acabamos de resumir.