rimal Scream no acapara los anuncios espectaculares de quienes frecuentan al rock como carretera frecuente, pero sí suelen llevarlo en la guantera quienes saben de los secretos y atajos de la buena música. Viejos consentidos de la escena británica, al mando del escocés Bobby Gillespie, héroe sin corona del brit-pop, a pesar de que gracias a su brillante disco Screamadelica (1991) fue el eslabón perfecto entre los Stone Roses, el rave y el rock rumbo a los años 90, donde lo bailable y las guitarras pudieron comenzar a convivir de manera natural, aquél sabe bien que es un artista, no una estrella; que lo suyo es explorar sonidos, ya dentro de las distorsiones de seis cuerdas o del lado de los timbres eléctricos que salen de teclados análogos, cámaras de eco y demás aparatos.

Fundada en 1984, Primal Scream no ha dejado de tener momentos altos, como ocurrió con Vanishing Point (1997); el agresivo electro-industrial XTRMNTR (2000) o el electro-fashion Evil Heat (2002). Lástima que dieron un bajón con el rocanrolero y vaqueril Riot City Blues (2006) y con el Beautiful Future (2008).

Sin embargo, es con More Light (2013) que el ex Jesus and Mary Chain y compañía vuelven con todo. La inercia del viejo rocanrol inspirado en los Rolling Stones de los años 70 fue dejada atrás, para ponerse más psicodélicos, intensos, oscuros, subterráneos y exquisitos. “It’s modern rock and roll”, dice Gillespie: Queríamos salir del momento oscuro en que estábamos rumbo a uno mejor. Ya no con un rock directo, de energía evidente, sino con algo más sofisticado, caleidoscópico y orquestal.

Y vaya que lo lograron Gillespie, Andrew Innes, Martin Duffy y Darrin Mooney: éste su décimo disco, es en efecto luminoso, como el título indica (Más Luz), en que pieza clave fue el productor David Holmes, quien trabajó con ellos desde el XTRMNTR. Aquí, la banda reúne varias de las virtudes sónicas acuñadas a lo largo de su historia, sin sonar a lo antes hecho sino a una inyección de vitalidad creativa que pudo verse y disfrutarse en su reciente actuación en el festival Glastonbury 2013. No pierden el estilo encendido ni la locura post-rehabilitación. Eso sí: no más funkanrol mántrico ni blues-rock setentero pretendiéndose moderno. Los efectos espaciales, generados por armonizaciones ricas y profusas, suenan misteriosos, cálidos, refulgentes, entre juegos de metales harto groovies; cascabeles, pianos magros, celestas, hammonds, mellotrón, guitarras orquestales mas no estruendosas, cítaras, coros funk-souleros. Su viejo brit-gospel se asoma en uno que otro tema, aunque son los menos. Atmósferas de etéreo rock campirano, pantanoso, un tanto endiablado, varían entre explosiones free-jazzeras o kraut-roqueras, muy a lo Can, así como invitados de lujo: Robert Plant cantando en un tema; Debbie Googe de My Bloody Valentine en el bajo (una vez que Gary Mounfield, Mani, se movió a girar con su banda original, The Stone Roses), aunque ahora está de planta la bajista Simone Butler. More Light es uno de los discos más agraciados del año, lleno de pasión y convicción artística. Elegante, diverso, profundo. Hay Primal Scream para rato.

URSS BEA, Por la Educación, Hip hop

Viernes 12. 1. URSS Bajo el Árbol en showcase: sólo entras si compraste su nuevo disco 7 (se vende en línea: http://bit.ly/1dnZvUc). Frontera 91, Roma. 20 horas. 2. Noche yeyé: XV aniversario de Los Magníficos. Invitados: Cavernarios, Botica Xochimilco, Quinta Galaxia, entre otros. Alicia (Cuauhtémoc 91-A, Roma). 20 horas, $70.

Sábado 13. 1. Muy recomendable este trío de Brooklyn, A place to bury strangers: electro-punk sucio y ruidoso, con toques de shoegaze, sin dejar de ser melódico. Pasagüero (Motolinia 33, Centro). 22 horas. Boleto sencillo: $350; doble: $650. 2. Noche de chicas hip-hoperas de los barrios latinos estadunidenses: Ms Krazie (Texas) y Reverie (Los Angeles). Bombay (Eje Central 99, Centro); 18 horas, $260. 3. Plastics Revolution. Electropop fino dentro del ciclo Fusión 013. Plaza de las Artes del CNA. 13 horas, entrada libre. 4. Velada por la Educación: Rastrillos, Salario Mínimo, Mexikan Sound System, entre otros. 19 horas del sábado a las 7 horas del domingo. Explanada Rectoría UNAM, acceso libre.

Jueves 18. 1. Como parte del ciclo Alterna Jazz, lujo total con el texano Trey Gunn, virtuoso del Chapman Stick, ex King Crimson, entusiasta del prog-rock, el ambient y la improvisación libre. También: Michael Manring, a su vez virtuoso del bajo eléctrico; en la misma línea, el mexicano Alonso Arreola. Centro Cultural Roberto Cantoral (Puente de Xoco, puerta A, Colonia Xoco), 20 horas, $252 a $711. 2. Los argentinos de Babasónicos y su pop fresón cierran la gira de su disco A propósito (2012), con el que no les fue muy bien. Metropolitan (Independencia 90, Centro). 20 horas, $200 a $900 (más recomendaciones).

Twitter: patipenaloza