Martes 2 de julio de 2013, p. 12
Al cumplirse un año del proceso electoral de 2012, decenas de personas respondieron a una convocatoria realizada en redes sociales para sumarse a una movilización que demandó la dimisión de Enrique Peña de la Presidencia de la República y la defensa del petróleo.
Fue una marcha sin un rumbo establecido. La cita fue a las 18 horas en el Ángel de la Independencia, donde se amagó realizar una acampada, idea que se desechó porque los granaderos cercaron el monumento. Entonces se decidió marchar a la Torre de Pemex. Cuando los manifestantes estaban por llegar a Circuito Interior los uniformados intentaron hacerles un alto y cercarlos con una valla, la cual fue superada a empujones al grito de déjenos pasar, déjenos pasar
. A la movilización se sumaron integrantes de diversos colectivos, como el Frente Oriente, Acampada Revolución, estudiantes de la UNAM y del IPN, y grupos anarquistas
; la protesta transcurrió sin incidentes, salvo algunos escarceos con los policías. Mientras los organizadores hablaron de 3 mil participantes, las autoridades del Distrito Federal calcularon 500, muchos de ellos encapuchados. Se escucharon consignas como: México sin PRI; Peña entiende, el pueblo no te quiere, y Pemex no se vende
. Al llegar a la sede administrativa de la paraestatal se decidió regresar a la Columna de la Independencia. Al llegar ahí un nuevo cambio de rumbo: Zócalo, Zócalo
, se escuchó. Y avanzaron hasta la Plaza de la Constitución. Antes hicieron un alto frente al Senado, donde policías peleraon con algunos jóvenes, por momentos se dio cierta tensión, pero la mayoría de los inconformes corrió para tranquilizar a sus compañeros y seguir la marcha. Al llegar a la calle de Madero casi esquina con Eje Central algunos manifestantes quemaron señales que se usan para controlar el tránsito y lanzaron botellas de vidrio contra los policías, aunque una vez más la mayoría llamó a no caer en la violencia y los contingentes siguieron su camino.