Silverstone, 30 de junio.

El alemán Nico Rosberg ganó con Mercedes un accidentado Gran Premio de Fórmula 1 de Gran Bretaña, en el que su compatriota Sebastian Vettel se retiró por primera vez en la temporada y el español Fernando Alonso finalizó tercero tras una remontada, aunque la nota se la llevó Pirelli con las espectaculares explosiones de neumáticos que afectaron a varios pilotos y por fortuna no pasaron a mayores.

El segundo puesto de la loca carrera en el circuito de Silverstone quedó en manos del Red Bull del australiano Mark Webber, que celebró así un gran resultado después de anunciar su retiro a partir de la próxima temporada.

Cuarto se ubicó el Mercedes del británico Lewis Hamilton, quien logró una escalada impresionante, luego de pinchar un neumático en el inicio de la carrera.

El finlandés Kimi Raikkonen finalizó en quinto lugar con su Lotus, resultado suficiente para arrebatar al alemán Michael Schumacher el récord de carreras consecutivas sumando puntos en 25 Grandes Premios desde Bahrein 2012.

Vettel, quien lideraba la prueba, abandonó por un fallo en la caja de cambios cuando faltaban 10 giros para concluir la carrera, lo que aprovechó Alonso –noveno en la salida de parrilla– y con su Ferrari ingresó a la meta en tercer lugar para dejar la diferencia con el alemán en la clasificación general en 21 puntos.

Fue una carrera marcada por una extraña sucesión de ponchaduras que coloca a los neumáticos Pirelli otra vez en el centro del debate, en la que los mexicanos Esteban Gutiérrez (Sauber), quien terminó en el puesto 14 y Sergio Pérez (McLaren), que abandonó, resultaron también afectados.

Fue una carrera loca en la que pasaron muchas cosas. Debemos tomar con medida la seguridad de los pilotos porque podemos ver que fueron muchas las fallas con los neumáticos, dijo el regio, mientras Checo criticó que cuando mejor le iba (estaba entre los diez), explotó su rueda trasera izquierda.

En una jornada de calor y sol en el Reino Unido, el circuito de Silverstone fue testigo de una carrera cambiante desde el comienzo hasta la última vuelta al verse interrumpido en dos ocasiones entre las vueltas 16 y 22 para que Rosberg sumara su segundo triunfo de la temporada.

La victoria de Rosberg tuvo algo de suspenso fuera de la pista cuando fue convocado por las autoridades de la carrera por no haber bajado la velocidad ante una bandera amarilla. Examinaron los videos y sólo recibió una advertencia.

La marca italiana Pirelli señaló en un comunicado que sus ingenieros van a investigar con seriedad las causas de los fallos antes del GP de Alemania, la próxima semana.