San Salvador, 27 de junio.

Unos 2.000 veteranos del ejército y la ex guerrilla de El Salvador se manifestaron este jueves para demandar al Congreso agilizar la aprobación de una ley que contemple indemnizaciones y pensiones para los combatientes en la guerra civil (1980-1992), constató un periodista de la Afp.

El problema es que están jugando con el veterano. Es una táctica dilatoria (de los diputados) para terminar con su período sin resolver nada, declaró a la Afp el sargento Manuel Rodríguez, presidente de la Coordinadora de Veteranos de Guerra de la Fuerza Armada.

Los desmovilizados presentaron a la Asamblea Legislativa en agosto de 2012 un proyecto de ley para obtener una indemnización de 5 mil dólares y una pensión de 350 dólares mensuales, declaró por su parte el sargento Julio Aguilar, de la Asociación de veteranos de guerra de Santa Ana.

La marcha, en la que también participaron ex guerrilleros del Frente Farabundo Martí para la Liberación Nacional (FMLN, izquiera en el poder), salió de una plaza y llegó a las proximidades de un hotel donde era celebrada una reunión del Parlamento Latinoamericano.

Pedimos a los diputados aprobar la ley de beneficios para el veterano, Unidos en una sola orientación: la aprobación de la ley de veteranos del FMLN histórico y de la Fuerza Armada, se leía en pancartas de los manifestantes.

Una alambrada colocada por la policía antimotines impidió a los excombatientes llegar hasta el hotel donde estaban reunidos los parlamentarios.

Roberto D´aubuisson y Enrique Valdés, diputados de la opositora Alianza Republicana Nacionalista (Arena, ultraderecha), recibieron a una delegación de los manifestantes.

Estamos en la disposición de escucharles para aprobar la ley de veteranos de guerra, declaró D´abuisson, hijo del fallecido mayor Roberto D´aubuisson, fundador de Arena y de los temidos escuadrones de la muerte.

Por su parte, el presidente del Congreso, Sigfrido Reyes, declaró a la prensa que las demandas de los veteranos son justas, que están dispuestos al diálogo, pero estimó que en algunos casos los montos de prestaciones que piden parecen estar más allá de las posibilidades de la hacienda pública.

Los veteranos de guerra advirtieron que si el Congreso no aprueba la ley boicotearán los comicios presidenciales del 2 de febrero de 2014.