La discusión en torno a la reforma energética aún no se inicia en el Pacto por México, aseguró el presidente del consejo rector del mismo, César Camacho Quiroz.

Cuestionado en torno a las declaraciones del diputado panista Rubén Camarillo, quien afirmó que hay un grupo que trabaja en la iniciativa para abrir Petróleos Mexicanos (Pemex) al capital privado, la cual habrá de presentarse en septiembre, el también dirigente nacional del PRI respondió: no en la mesa del pacto.

En entrevista, el senador Manuel Bartlett Díaz, del PT, dijo que es obvio que están cocinando ya la privatización total de Pemex; resaltó que el diputado Camarillo fue uno de los impulsores de la reforma de 2008 –entonces era senador y secretario de la Comisión de Energía–, y ahora van por la entrega definitiva del crudo a las trasnacionales.

Retrotraer a México a 1930

A su juicio, lo único que queda es la movilización ciudadana para defender Pemex.

Bartlett destacó que el diputado Camarillo, junto con el priísta Francisco Labastida y el perredista Graco Ramírez, impulsó la reforma de 2008, mediante un proceso manipulado en que se engañó a la ciudadanía, al sostener que no era privatización ni desnacionalización de Pemex y que la empresa se modernizaría, lo que es falso.

“Camarillo está comprometido con el proceso de privatización y desnacionalización, y claro que junto con el PRI y el PRD de los chuchos están ya trabajando en la iniciativa, que luego se presentará dentro del pacto”, advirtió.

Con esa reforma pretenden dar el paso definitivo para retrotraer a México a 1930, porque quieren meter a las empresas trasnacionales, a las grandes corporaciones, ya no a las de servicios, que ya están en todos lados en México suplantando a Pemex.

Coordinador del PT en el Senado, advirtió que la pretensión es modificar la Constitución para traer a British Petroleum, a Texaco y las demás trasnacionales, con la absurda idea de que Pemex debe competir con ellas para ver quién saca más petróleo, que va a terminar en poder de esas corporaciones extranjeras.

Sobre la postura de BBVA, el banco español que se pronunció en favor de la entrada de capital privado a la exploración y refinación en Pemex, abrir por completo la petroquímica básica y permitir entre particulares la venta de electricidad, lo que, dijo, aumentará el potencial de crecimiento de la economía mexicana en medio punto porcentual, Bartlett preguntó: ¿de dónde saca esto?, y cuestionó también que el valor del incremento del producto interno bruto generado por la apertura de Pemex al capital privado equivalga a 75 mil millones de pesos, como según BBVA señalan datos oficiales.

¿Cuáles son esos datos oficiales de que habla este banco?, insistió. Hizo notar que no debe olvidarse que el BBVA está totalmente vinculado a esa penetración que han hecho las empresas españolas en el sector energético nacional, por eso se mete también a hablar de electricidad.

En realidad, dijo, lo único que está haciendo ese banco español es presionar para seguir haciendo grandes negocios privados con empresas públicas, para seguir supliendo a Pemex y la Comisión Federal de Electricidad de manera inconstitucional, como hicieron a la sombra de Calderón, de Fox, de Salinas.