Personal de la agencia de Migración y Aduanas de Estados Unidos (ICE, por sus siglas en inglés) detuvieron, a solicitud del gobierno de Tabasco, a José Manuel Saiz Pineda, ex secretario de Finanzas de aquella entidad durante la administración de Andrés Granier Melo (2007-2012). Posteriormente lo entregaron –en calidad de deportado– a la Policía Federal Ministerial (PFM), dependiente de la Procuraduría General de la República (PGR), para que fuera puesto a disposición de un juez tabasqueño.

Funcionarios del gobierno federal informaron que Saiz Pineda llegó al puente internacional que conecta Reynosa, Tamaulipas, con Hidalgo, Texas, a las 11 de la mañana, y pidió autorización a las autoridades de Estados Unidos para ingresar más allá de 20 millas de la frontera y visitar a sus hijas que estudian en esa nación.

Los agentes de ICE (migración estadunidense) le informaron que su visa había sido cancelada por problemas administrativos, le pidieron esperar y tras realizar un intercambio de información con autoridades mexicanas, revisaron las alertas migratorias emitidas y detectaron que ya se había pedido la detención del ex funcionario tabasqueño por Interpol y lo retuvieron cuatro horas. Luego le dijeron que sería deportado a México.

Posteriormente, elementos de la PFM que participan como agentes de Interpol en territorio mexicano se presentaron en el puente internacional y los agentes de ICE pusieron a su disposición al ex tesorero tabasqueño bajo la figura de la deportación.

Saiz Pineda ha sido señalado por la Procuraduría General de Justicia de Tabasco como uno de los responsables de desvíos de recursos de las arcas del gobierno de esa entidad, en contubernio con el ex gobernador Andrés Granier Melo.

Los funcionarios consultados señalaron que Saiz Pineda trató de solicitar asilo al gobierno estadunidense y éste le fue negado.

Según los abogados del ex secretario de Finanzas, éste viajaba en compañía de Ricardo Lecumberri, un especialista estadunidense en derecho migratorio, pero los agentes de ese país no le permitieron recibir asistencia legal para conocer el motivo exacto de la detención, y menos aún el trámite jurídico que las autoridades pretendían realizar, señaló el penalista mexicano, Xavier Olea Muñoz.

La aprehensión de Sainz Pineda y su traslado a la capital tabasqueña tienen origen en la averiguación previa DGI/67/2013, que consta de 28 tomos, en la cual se acusa al ex tesorero, igual que al ex gobernador Granier Melo, por el presunto desvío de 2 mil 400 millones de pesos del presupuesto tabasqueño, y por el descubrimiento de 88.5 millones de pesos en un domicilio de su colaboradora Marlis Cupil López, quien también enfrenta denuncias penales por el mismo caso.

Cuando Saiz Pineda estuvo en manos de los policías mexicanos, alrededor de las 15 horas, fue trasladado por tierra a Monterrey, Nuevo León, de donde sería conducido por la PGR a Villahermosa, Tabasco, para entregarlo a un juez de esa entidad, luego que ayer (viernes) se libró la orden de aprehensión en su contra, señalaron las autoridades mexicanas.

Los abogados Xavier Olea y José Antonio Bonilla Uribe señalaron que no hay garantías en Tabasco para que sea juzgado, y seguramente se le va a dictar el auto de formal prisión porque todo se ha realizado sin permitir una adecuada defensa de los inculpados en este caso, y todo se trata de una persecusión política.

Bonilla Uribe dijo que buscarán que el caso pase al fuero federal donde sí confiamos en la justicia, porque en Tabasco no hay jueces independientes del gobierno local. Esta manera de resolver el expediente evidencia que la orden de arresto fue librada por consigna, ya que la averiguación previa fue depositada el pasado viernes, y en menos de 24 horas se analizaron 28 tomos. Es imposible, dijeron.

Permanece en Monterrey

Hasta el cierre de esta edición, Saiz Bonilla permanecía en el aeropuerto internacional de Monterrey y no había sido trasladado a Villahermosa.

El pasado 5 de junio, el ex secretario de Administración y Finanzas no se presentó a declarar ante la PGJE y en su lugar asistió su abogado Xavier Olea Peláez, quien aseguró que su cliente no llegó a la cita judicial porque no estaban dadas las condiciones para que compareciera personalmente ante las autoridades tabasqueñas, ya que pudiera ser detenido o arraigado a su llegada.

Saiz Pineda ha sido exhibido en fotos cuando adquirió en Mérida, Yucatán –donde radicó desde enero pasado– un automóvil marca Ferrari F430 valuado en 4 millones 506 mil pesos, aunque su defensa aseguró que ese vehículo lo adquirió en 2006, cuando aún no era funcionario, y no lo pagó con dinero público, además de añadir que el ex secretario de Finanzas siempre ha sido un hombre adinerado y puede comprar el auto que quiera.

El viernes pasado, agentes de la PGJE le decomisaron cuatro motocicletas, equipo y al menos 10 trajes para practicar ese deporte, en una de las propiedades del ex secretario de Finanzas, cuyos vehículos y accesorios fueron trasladados a las instalaciones de la dependencia.

Con información de René A. López y Julia Le Duc, corresponsales