La Orquesta Sinfónica de Minería (OSM) anunció este lunes la programación de su Temporada de Verano 2013, que en nueve presentaciones conmemora los bicentenarios de Wagner y Verdi, además de los centenarios de Benjamin Britten, Witold Lutoslawski, del estreno de La consagración de la primavera, de Igor Stravinsky, y Gurrelieder, de Arnold Schoenberg, entre otros.

De esta forma, la agrupación celebra, del 6 de julio al primero de septiembre, los 35 años de continuidad de su proyecto estival y de la existencia de su Academia de Música con la interpretación de esta variopinta muestra de creación artística, informó en conferencia su presidente, Gerardo Suárez.

También se recordó el cincuentenario luctuoso de Paul Hindemith durante el anuncio en el que participaron José Areán, director asociado; Sergio Vela, consejero artístico; Gerardo Suárez; Rolando Zárate, vicepresidente, y Gonzalo Guerrero, vicepresidente honorario de la Academia de Música de Minería.

La gala inaugural se centrará en composiciones de Verdi y conjuntará la participación de la soprano rusa María Gavrilova y el Coro del Teatro de Bellas Artes. Mientras, la clausura retomará Gurrelieder, que ha sido interpretada sólo una sola vez debido a la gran orquestación y magnitud coral que incorpora.

Esta interpretación de la obra de Schoenberg unirá a los tenores John Uhlenhopp y Víctor Hernández, la soprano Gweneth Ann Jeffers, la mezzosoprano Ruxandra Donose, el barítono Josué Cerón, Marc Embree como narrador, dirigidos por John Daly Goodwin.

Destaca la composición de dos obras para la temporada de otoño, a la que Sergio Vela llamó festival, de los reconocidos autores mexicanos: el Concierto para timbales y orquesta, de Gabriela Ortiz, y De aquí a la veleta, de Javier Álvarez, cuyo estreno mundial ocurrirá dentro de la temporada de verano.

En su turno, Areán explicó la relevancia contrastante de Wagner y Verdi: Pertenecen al mundo de la ópera, sin embargo, son una especie de antípodas o antagonistas que en vida y en obra pasaron a ser colaboradores sin querer serlo, sin conocerse, simplemente por ser contemporáneos y por ser dos actores importantísimos... cambiaron la historia de la música para siempre.

Para el director asistente, Britten, el más grande compositor inglés del siglo XX, y Lutoslawski tuvieron en su destacado papel en esta rama de la expresión artística. Se compensan, extrañamente, de manera similar a Verdi y a Wagner, porque el primero, siendo un revolucionario también fue un evolucionista, y Wagner, más un revolucionario real. Britten y Lutoslawski comparten un poco estas características. Britten es más el evolucionista.

Sobre los centenarios de La consagración de la primavera y de Gurrelieder –continuó Areán–, la composición de Stravinky cambió la faz la historia de la música... Una obra enormemente impactante en cuanto a su poderío y que no ha envejecido. Con Gurrelieder, quizá el siglo XIX deja de existir para dar paso a una nueva expresión.

Otros de los participantes destacados en la temporada de verano son los violinistas Philippe Quint, Kim Kashkashian y Sasha Rozhdestvensky, las pianistas Lilya Zilberstein y Valentina Lisitsa, y el director catalán Antoni Ros-Marbà.

Previo a las presentaciones en la Sala Nezahualcóyotl se realizarán pláticas de apreciación musical, impartidas de forma alternada por el crítico musical Juan Arturo Brennan y el director coral Óscar Herrera.

Información detallada del programa se puede ver en el sitio http://mineria.org.mx.