Con el propósito de incrementar la cantidad de medallas que puedan conquistarse en los Juegos Olímpicos de Río de Janeiro 2016, el subdirector de Calidad para el Deporte, de la Comisión Nacional de Cultura Física y Deporte (Conade), Othón Díaz, propondrá brindar apoyo adicional, con recursos de la iniciativa privada, a los deportistas con opciones reales de subir al podio.

No se trata de minimizar el trabajo de los competidores nacionales, acotó, a quienes se les seguirán dando facilidades para prepararse de acuerdo con la actual reglamentación deportiva, pero sí se buscaría crear una organización que no sólo brinde los recursos financieros adicionales, sino todo lo que tiene que ver con la preparación.

Aunque no reveló los nombres de los competidores que serían los beneficiarios con la puesta en marcha de este proyecto, en caso de ser aprobado la próxima semana por la propia Conade, puso de ejemplo al halterista José Lino Montes.

Él puede ganar una medalla olímpica, pero debemos darle un apoyo muy especial para que lo logre, además de pensar en algunas otras muchachas que pueden estar en la misma situación, si no para Río, para los siguientes Juegos Olímpicos, indicó.

Díaz Valenzuela agregó que se buscarían entrenadores de calidad, casi personales, porque a veces un solo preparador debe atender a muchos competidores y es una labor muy desgastante que reduce el tiempo que puede dedicarse a los más destacados, pero este trabajo se tratará de que lo pague la iniciativa privada.

Dijo que debería establecerse un reglamento muy estricto, en el que se especificaría a sus integrantes que “tendrán todo lo que necesitan, inclusive más de lo que les puede brindar en este momento CIMA (Compromiso Integral de México con sus Atletas), pero las reglas serán éstas: de ética, de cumplimiento de metas y de comportamiento.

Quienes no se atengan, deberán salir del programa, advirtió, como lo hizo durante su administración en la Fundación Harp Helú para el deporte.

Sin embargo, para que el proyecto funcione deberán estar de acuerdo no sólo los responsables de la Conade, sino también las federaciones deportivas.