Es la principal causa de enfermedad y muerte que se puede prevenir
Hay que incrementar el impuesto a los cigarros, opina el experto del INER Raúl Sansores
Miércoles 29 de mayo de 2013, p. 39
El consumo de tabaco es la principal causa de enfermedad y muerte que se puede prevenir. Sin embargo, al año se reportan en México alrededor de 60 mil decesos por males cardio y cerebro-vasculares, enfermedad pulmonar obstructiva crónica (EPOC), cáncer y problemas musculo-esqueléticos, entre otros.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) considera que a escala global ocurren entre seis y 10 millones de fallecimientos por dichos males y que al final del siglo habrán perdido la vida por causa del tabaco mil millones de personas.
Las consecuencias del tabaquismo y la adicción a la nicotina representan para la organización internacional un asunto de la mayor gravedad por el daño a la salud y la vida de las personas.
Por ello impulsó hace 10 años el Convenio Marco para el Control del Tabaco (CMCT), el cual contiene medidas encaminadas a erradicar la adicción.
Para ello, los 168 estados que suscribieron el documento, México incluido y el primero en América Latina, se comprometieron a aplicar medidas, como garantizar espacios 100 por ciento libres de humo de tabaco, aplicar impuestos por el equivalente a 75 por ciento del precio de los cigarros, ordenar la colocación de pictogramas y advertencias sanitarias en las cajetillas y prohibir todo tipo de publicidad y patrocinio de la industria tabacalera, entre otros.
En México está vigente desde agosto de 2008 la Ley General para el Control del Tabaco (LGCT). El ordenamiento incluye varias medidas comprometidas en el convenio marco.
Sin embargo, todavía falta trabajar más para pulir la tarea
, señaló Raúl Sansores, jefe del Departamento de Investigación en Tabaquismo y EPOC. Lo que sigue es incrementar el monto del impuesto a los productos del tabaco.
El gravamen de siete pesos por cajetilla representa 67 por ciento del precio final del producto, pero no se actualiza con base en el índice inflacionario y todavía no está al nivel de lo que plantea el CMCT.
Sansores manifestó que también hace falta asegurar el cumplimiento de la ley en cuanto a los espacios públicos libres de humo e incrementar el tamaño de los pictogramas. Actualmente ocupan 30 por ciento de la cara frontal de los cajetillas, el mínimo aceptado por el CMCT. El acuerdo estipula que las imágenes deben ocupar la mitad del espacio en la cara principal de éstas.
Respecto de la publicidad, la LGCT permite los anuncios en revistas para adultos, aunque el CMCT plantea que la prohibición debe ser total, lo mismo que la promoción y patrocinio de eventos por la industria tabacalera.
Un problema grave que persiste a pesar de la prohibición de ley es la venta de cigarros sueltos y a menores de edad.
El especialista del Instituto Nacional de Enfermedades Respiratorias resaltó que un asunto prioritario para las autoridades debería ser la difusión de la LGCT, que las personas no fumadoras conozcan sus derechos y la posibilidad que tienen de denunciar cuando se incumple la norma.