Mi estatus como testigo no es una sorpresa; siempre actué en interés del Estado
, aduce
Sábado 25 de mayo de 2013, p. 33
París, 24 de mayo.
La directora gerente del Fondo Monetario Internacional (FMI), Christine Lagarde, no enfrentará un proceso acusatorio en su contra por su presunta participación en una controvertida indemnización cuando era ministra de Finanzas de Francia, determinó hoy un tribunal en París.
Después de ser interrogada por segundo día consecutivo, Lagarde dejó hoy la corte como testigo asistido
o testigo sospechoso
, esto significa que hay indicios de que podría haber participado en un delito, pero no alcanzan para presentar una acusación en su contra.
Mi estatus de testigo asistido no es una sorpresa para mí porque siempre actué en interés del Estado y en conformidad con la ley
, declaró a la prensa Lagarde al término de los dos días de comparecencia y anunció que volvía a Washington para dar cuenta
al consejo de administración del FMI, que reiteró su confianza en Lagarde.
La junta ejecutiva ha sido informada sobre este asunto en numerosas ocasiones y en cada una de ellas manifestó su confianza en la capacidad de la directora gerente de realizar de forma eficiente sus tareas
, dijo en un comunicado el portavoz del organismo, Gerry Rice, quien adelantó que la junta volverá a ser informada sobre el asunto en los próximos días.
Lagarde, ministra francesa de Economía entre 2007 y 2011, compareció el jueves y el viernes ante la comisión de instrucción de la Corte de Justicia de la República (única instancia habilitada en Francia para juzgar a los miembros del gobierno por hechos ocurridos durante el ejercicio de sus funciones) para explicar su papel en la decisión de poner en manos de un tribunal arbitral privado y no en las de la justicia la solución de un largo diferendo por la venta de la firma deportiva Adidas entre el banco Crédit Lyonnais y el empresario Bernard Tapie (cercano al entonces presidente Nicolás Sarkozy), quien acusó al otrora banco estatal Credit Lyonnais de estafarlo en la venta en 1993 de su parte del fabricante de artículos deportivos y terminó cobrando 400 millones de euros de compensación.
La Fiscalía cree que Lagarde podría haber malversado fondos públicos, ya que el dinero empleado para zanjar la disputa procedía de las arcas del Estado. Lagarde niega haber actuado incorrectamente y ha sostenido siempre que el arbitraje permitió poner fin a un contencioso largo y costoso y que era la mejor solución en la época
.
El fiscal le reprocha haber recurrido a un arbitraje privado cuando se trataba de fondos públicos, haber estado al tanto de la parcialidad de ciertos jueces del arbitraje, haber hecho modificar el protocolo inicial para integrar en él una noción de perjuicio moral (lo que permitió que Tapie cobrara una indemnización suplementaria de 45 millones) y no haber apelado ese arbitraje, cuando varios especialistas así se lo recomendaron.
Tapie apoyó en 2007 la campaña presidencial de Nicolas Sarkozy, en cuyo gobierno ocupó luego un cargo la actual jefa del FMI.