Londres, 24 de mayo.

La final de la Liga de Campeones enfrentará el sábado en el estadio Wembley al Bayern Munich, favorito, y al Borussia Dortmund, dos equipos que encantaron a Europa en semifinales y cuyo enfrentamiento confirma la llegada del futbol alemán a la cima del continente.

Las series ganadas por el Borussia frente al Real Madrid (4-1 y 0-2) y por el Bayern contra el Barcelona (4-0 y 3-0) surgieron como momento único para el balompié teutón, al punto de imaginar el inicio de una nueva era.

Ver a los dos gigantes españoles derrotados con esa manera alemana de reinventar el futbol total, con una presión intensa y mucho juego directo, puso a la luz una Bundesliga donde los estadios están llenos, hay muchos goles y las finanzas son más sanas que en otros lugares.

Será la primera final de la historia de este torneo entre dos equipos germanos. Y ambos rivales proponen una noche de gran futbol, con la ilusión de que el partido no se rompa demasiado pronto, porque la realidad es que el Bayern, que busca su quinta corona europea, es el claro favorito.

Y el Borussia Dortmund tiene otro hándicap en contra: la ausencia del lesionado Mario Götze, su mayor estrella junto al polaco Robert Lewandoski. El atacante alemán al menos evitará enfrentarse a su equipo de la próxima temporada.

El Bayern Munich llega a Wembley con el reto de demostrar que enterró el recuerdo del año pasado, cuando perdió en su propio estadio ante el Chelsea en la tanda de penales, y confirmar que está listo para emprender una era dominante.

Ningún equipo impresionó más esta temporada que el de Jupp Heynckes, que encara la posibilidad de cumplir una campaña histórica con un triplete. Ganó la liga alemana con terrible superioridad y también jugará ante el Stuttgart la final de la Copa de Alemania.

Heynckes, de 68 años, quien dejará su sitio a catalán Josep Guardiola, comentó: Probablemente mañana sea mi última oportunidad de ganar este trofeo. Será un partido muy importante para el club, para los jugadores y, claro, también para mí. Pero ya tuve esa experiencia con el Real Madrid (en 1998). Para mí será un partido más.

Otra arista de la contienda es la rivalidad Adidas-Puma. Adidas es proveedor de indumentaria del Bayern desde hace mucho tiempo y posee una participación de alrededor de 9 por ciento en el club, mientras Puma se convirtió en socio del Dortmund hace un año.

Las compañías alemanas fueron fundadas tras una pelea de los hermanos Dassler en la ciudad bávara de Herzogenaurach en la década de 1940 y actualmente están entre las marcas deportivas más reconocidas del mundo.